COLUMNA INVITADA

Hacia una ciudad sin ruido

En promedio, la Ciudad de México tenía sólo 15 días con calidad auditiva al año para 2016. Esto quiere decir, que el resto del tiempo quienes aquí vivimos y nos movemos estamos expuestas y expuestos a 85 decibeles de ruido, es decir, 20 decibeles más de los recomendados por la OMS

OPINIÓN

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Temístocles Villanueva Ramos / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de México Créditos: Foto: Especial

Para quienes vivimos, trabajamos y transitamos en la Ciudad de México, es innegable que nuestra ciudad es ruidosa. Y aunque en el imaginario colectivo existen sonidos icónicos que son parte de la forma en que concebimos la vida en la capital, lo cierto es que el ruido que enfrentamos día a día no se reduce al tradicional organillo, los cantos de las aves o, incluso, las cumbias que acompañan el camino en el micro o el perifoneo del fierro viejo. De hecho, de acuerdo con una investigación realizada por el portal Animal Político hace unos años, la Ciudad de México podría considerarse como una de las cinco ciudades más ruidosas del planeta, lo que tiene consecuencias negativas en la salud y la convivencia de las y los capitalinos.

En promedio, la Ciudad de México tenía sólo 15 días con calidad auditiva al año para 2016. Esto quiere decir, que el resto del tiempo quienes aquí vivimos y nos movemos estamos expuestas y expuestos a 85 decibeles de ruido, es decir, 20 decibeles más de los recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

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Lo anterior puede traducirse en daños auditivos, pero también en otro tipo de afectaciones de corte psicoemocional como el estrés. la ansiedad o trastornos del sueño e, incluso, una mayor propensión a sufrir hipertensión, taquicardia, dolores de cabeza y pérdida de la agudeza visual. De acuerdo con información de la Universidad Autónoma Metropolitana, la mayor cantidad de ruido suele concentrarse en avenidas principales, algunas líneas del metro y ciertas zonas comerciales caracterizadas por su actividad restaurantera y bares. Vecinas y vecinos, preocupados por este tema, han identificado en redes sociales algunos puntos de mayor ruido en la capital, los cuales se concentran en las alcaldías Cuauhtémoc, Coyoacán, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Venustiano Carranza. En lo referente al ruido provocado por restaurantes, bares y clubes nocturnos, la alta concentración de este tipo de establecimientos en zonas habitacionales, acompañada de la falta de diálogo entre personas vecinas y locatarias, y ciertas ambigüedades en el establecimiento de responsabilidades institucionales; han llevado a que este sea un problema muy presente en el día a día de quienes habitamos estas Alcaldías, con las ya mencionadas consecuencias a la salud y la calidad de vida. Desde una perspectiva de derechos que busque transversalizar el derecho a la Ciudad, la calidad de vida y el acceso a un medio ambiente libre de contaminación auditiva son derechos que debemos garantizar desde el gobierno y el Congreso. En este sentido, en marzo del año 2021 las y los legisladores aprobamos una iniciativa que cataloga el exceso de ruido como una actividad riesgosa en la Ley de Protección a la Tierra, estableciendo distintas sanciones a quien lo provoque.

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No obstante, el problema del ruido sigue siendo una constante, que nos demanda un esfuerzo aún más activo y coordinado para asegurar la calidad auditiva de quienes conformamos la capital. En este sentido, de la mano con vecinas y vecinos de algunas colonias de la alcaldía Cuauhtémoc, que es uno de los epicentros del problema, trabajamos en una ruta para su atención. El objetivo es asegurar a las y los habitantes de la Ciudad que los restaurantes, bares y clubes nocturnos sigan sus actividades; pero garantizando el respeto a los límites de ruido marcados por la OMS, lo que se traducirá en mejores condiciones de vida, salud, descanso y convivencia. Este es. innegablemente, un tema que nos toca a todas y todos. La pandemia, como muy pocas experiencias previas, nos enseñó la importancia de mantener un buen estado de salud mental y un ambiente apto para el trabajo o el estudio en todo momento y contexto. Sigamos trabajando para que esto se traduzca en leyes y políticas públicas acordes con la realidad de las personas, construyendo con ello una ciudad más habitable, incluyente, empática y saludable para todas y todos.

POR TEMÍSTOCLES VILLANUEVA RAMOS
DIPUTADO DE MORENA EN EL CONGRESO DE LA CDMX
@TEMISTOCLESVR

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