COLUMNA INVITADA

Seguridad Pública: Deseos para 2022

Que se anuncie un reforzamiento en la policía dependiente de la Fiscalía General de la República

OPINIÓN

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Manelich Castilla / Colaborador / Opinión El Heraldo de México

Llegar a diciembre sin desear que algo cambie a partir del primer día del nuevo año, es negarse la posibilidad de la esperanza que desde la infancia se alimenta de forma especial en estas fechas. Hay quienes centran esa ilusión en aspectos materiales, otros con relación a su salud o aspecto. Algunos, apuestan a la llegada del amor o al siguiente paso profesional.

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Más allá de lo difícil que resulta no esperanzarse con alguno de los aspectos antes mencionados, existen algunos otros, personalísimos y tan relevantes como los demás. A mi me gustaría que 2022 traiga algunos cambios en la política de seguridad pública. Y como desear es ejercicio de libertad que no afecta a nadie, mis deseos son:

Que el gobierno federal impulse el Modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica, y retome el discurso de que tareas de Fuerzas Armadas en seguridad pública son subsidiarias. En ese contexto, se anuncie el fortalecimiento de las policías municipales y estatales, comenzando con la formación en mejores prácticas para investigar delitos, y se estrenen las unidades de investigación correspondientes en estados y municipios que no la tienen (la inmensa mayoría).

Que los estados aprovecharan presencia de las Fuerzas Armadas y Guardia Nacional en sus respectivas jurisdicciones, para cumplimentar órdenes de aprehensión de asuntos relevantes que no se hayan ejecutado por no contar con las condiciones operativas para ello. Muchas veces el trabajo de las fiscalías locales requiere apoyo federal para la salvaguarda de su personal. No es sencillo que los temas de alto impacto sean llevados en el mismo territorio donde se reside, por las razones obvias de las amenazas y riesgos al entorno doméstico.

Que se anuncie un reforzamiento en la policía dependiente de la Fiscalía General de la República, incremente su estado de fuerza y se ponga en marcha el plan de capacitación más ambicioso en la historia de la institución. En este tema, sería deseable que enero traiga consigo también el nombramiento de un director o directora al frente del Instituto Nacional de Ciencias Penales, Inacipe, que todo 2021 estuvo acéfalo. 

Que se actualice un listado de objetivos criminales, se haga público y se emprenda un maxiproceso similar al que en su momento se hizo en Italia. Momento histórico en el combate al crimen organizado. No una declaración de guerra, sino el inicio de una ofensiva de carácter técnico jurídico y policial, que devuelva la confianza en las instituciones de seguridad y justicia.

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Finalmente, que miles de policías desdeñados por la dinamitación de la Policía Federal, sean punta de lanza para retomar el cauce civil de la seguridad pública en las entidades del país, sea aprovechada su experiencia y reconocida su trayectoria. Son mis deseos y no pierdo la esperanza de ver alguno cristalizado.

Nos leemos la primera semana de 2022. Gracias por acompañarme en este espacio durante 2021.

POR MANELICH CASTILLA
COLABORADOR
@MANELICHCC

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