Tras la pandemia que se desató por la COVID-19, la cual se gestó en Wuhan, China, ha traído consigo diversas problemáticas como sociales, laborales y familiares; en este sentido, los empresarios mexicanos que invierten en Estados Unidos para iniciar un negocio bajo las visas de inversor E1 y E2, tendrán más tiempo para hacer que su empresa crezca.
De acuerdo con información de EFE, el periodo para remontar negocios en EUA se ha extendido de un año a cuatro años, decisión que beneficia la economía estadounidense, ya que se crean condiciones para recibir un mayor flujo de capital extranjero.
Según el Departamento de Comercio, el índice de desempleo actual es de 8.4% y el Producto Interno Bruto (PIB) cayó un 31.7 % en el segundo trimestre de este año, por lo que el cambio en las visas E-1 y E-2 es muy significativo para el inversor mexicano.
Diferencias entre las visas E-1 y E-2
Las visas E-1 son de “no inmigrante”, es decir, personas que no tienen la intención de convertirse en residentes permanentes en Estados Unidos, mientras que las E-2 tienen como finalidad llevar a la residencia permanente y la ciudadanía tanto para el inversor como para su familia.
Las E-1 y E-2 requieren que el inversionista interesado haga una inversión mínima de 100 mil dólares en un negocio estadounidense que ellos podrán dirigir y controlar. Además si desean convertir sus visas a EB-5, podría tardar alrededor de 2 años en aprobarse pero pueden mantener su estado E-1 o E-2 mientras esperan a que se apruebe su nueva visa.
El Grupo Goldman Sachs es uno de los grupos de banca de inversión y de valores más grande del mundo, mismo que prevé que este año el PIB de México se contraerá un 9.8% tras la pandemia, por lo que sería un excelente momento para los empresarios mexicanos para invertir en negocios como para un cambio de residencia junto a su familia.
Por Redacción Digital El Heraldo de México
hfm