“Este deporte es de hombres, no de nombres”, Paquín Estrada.
“Poder económico no significa proporcionalmente mejor beisbol en el campo de juego”, aquí, su servidor.
Varios aficionados pueden agregar frases como “esos Yankees riquillos no pueden ganar siempre ni con sus millones” y pues sí, algo así ha estado sucediendo con los vecinos de los mencionados, los Mets en la misma ciudad de Nueva York.
Se ve más grande la grieta entre los equipos ricos y los que están apenas acorde con el tamaño de sus ciudades de no tanto poderío económico: curiosamente en los Estados Unidos llegan a decir “tan grande como el cañón del Colorado” y es precisamente en los Rockies donde vemos uno de cuantos luchan para vencer a un demasiado poderoso rival divisional del cual vamos a hablar.
Parece disco rayado, “la noticia que no es noticia” cuando los Dodgers de Los Ángeles (LAD) recién sumaron otra tremenda firma para un roster, el cual se ve como uno de esos buques rompehielos para las gélidas aguas del norte: sin fisuras en el casco de navegación… hacia un nuevo campeonato.
Si bien se les observó fallando hasta ese digamos “extraño” (por lo recortado del calendario) campeonato del año 2020, a los azules californianos una y otra vez se les tenía siendo unos letales contendientes en esa División Oeste de la Liga Nacional donde tienen como acérrimos enemigos a unos Gigantes quienes curiosamente se mudaron desde la mencionada Nueva York junto con ellos, allá por los lejanos años cincuentas del siglo pasado.
Es una tremenda rivalidad con los Gigantes y también con unos Padres de San Diego cercanos en ciudad, pero lejanos en “cariño beisbolero”, aún así han seguido sumando y sumando los angelinos de la Liga Nacional en cuanto a capital, talento y por supuesto expectativas de campeonato. Cabe mencionar como precisamente desde San Diego se mudaron hace muy poco los Chargers de la NFL hacia Los Ángeles, porque… mercado (grande) es mercado.
Los LAD tienen personajes clave -fuera del diamante- en el ex jugador de los Lakers de basketbol Earvin “Magic” Johnson Jr. (muy festejador coincidentemente con la NFL al ser también socio de los Commanders de Washington) y uno con etiqueta de “vital” en la persona de Andrew Friedman, este último literal antes hacía magia con unos Rayos de Tampa de mucho menor presupuesto.
Con ese personal, esas expectativas y esa chequera, los Dodgers renovaron a tremendo pelotero utility Tommy Edman, firmaron al estelar lanzador Blake Snell, no muchos se fijan pero su bullpen reforzado con relevista de lujo Blake Treinen, junto a Michael Conforto esa misma noche, igualmente retuvieron a un infaltable Teoscar Hernández.
Dieron tremendo boom con Roki Sasaki y ahora ¡¡¡Más fuerte bullpen con Tanner Scott!!
Con más de 70 mdd de “ventaja” en total de nómina sobre su más cercano en ese rubro (Phillies de Filadelfia) en las Grandes Ligas, cabe preguntar: ¿los Dodgers están siendo “competencia desleal”?
POR ALEJANDRO AGUERREBERE
COLABORADOR
EEZ