Por primera vez en la historia de México, dos mujeres están al frente de los destinos de la República. La doctora Claudia Sheinbaum Pardo, quien asumió como presidenta de todas y todos los mexicanos, y el sábado, en una solemne sesión del Congreso de la Ciudad de México, Clara Brugada, quien tomó posesión como jefa de gobierno de la capital del país.
Estos hechos marcan un hito en la vida política nacional porque, de manera simultánea, dos mujeres electas por la mayoría de los mexicanos lideran los destinos del país y de la Ciudad de México, el territorio más politizado de la República, sede de los Poderes de la Unión.
Esto es, sin duda, el reflejo de una transformación profunda en donde las mujeres toman el protagonismo que les corresponde.
En su primer discurso como jefa de gobierno, Clara Brugada hizo un reconocimiento a la presidenta Sheinbaum, dándole la bienvenida a la ciudad que, en sus palabras, "usted recuperó de la frivolidad y la corrupción para convertirla en una ciudad de innovación y derechos”.
Brugada reafirmó que ambas, juntas, seguirán construyendo el segundo piso de la Cuarta Transformación, honrando el legado de Andrés Manuel López Obrador, sin importar a quién le pese.
Clara Brugada subrayó que su mandato es un mandato ciudadano, que gobernará para la prosperidad y bienestar de todos los habitantes de la ciudad, con un énfasis especial en quienes menos tienen.
Prometió ejercer un gobierno comprometido no sólo con el presente, sino también con las futuras generaciones.
Llamó a trabajar desde el territorio, colaborando con las 16 demarcaciones para beneficio de la población, sin importar el origen partidario.
La Ciudad de México votó abiertamente por un proyecto progresista, feminista, anticlasista y antirracista. Votó por un modelo que busca erradicar las desigualdades sociales, económicas y de género, resaltó la morenista.
Dejó claro que es tiempo de mujeres y, por lo tanto, es momento de transformar su vida.
Lamentó que, a lo largo de la historia, las revoluciones han cambiado muchas cosas, pero no el lugar de las mujeres en el cuidado de las familias y la sociedad.
POR VÍCTOR HUGO ROMO DE VIVAR GUERRA
@VROMOG
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