La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) reconoce al huevo como uno de los alimentos más nutritivos de la naturaleza. Vale recordar que tiempo atrás se instaló la creencia que no era bueno comer uno o dos en el día, principalmente porque podía elevar el colesterol y por consiguiente aumenta el riesgo de padecer algún tipo de enfermedad cardiovascular. En la actualidad, no existe ningún estudio en donde se observe que el consumo de este alimento esté relacionado con ese tema.
Beneficios para la salud al consumir huevo
Los huevos son considerados una fuente completa de proteínas, ya que contienen todos los aminoácidos esenciales necesarios para el funcionamiento adecuado del organismo. Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), un huevo grande contiene aproximadamente 6 gramos de proteína de alta calidad. También son ricos en nutrientes esenciales para el cuerpo humano. Son una buena fuente de vitamina B12, vitamina D, vitamina A, riboflavina (vitamina B2), ácido fólico, hierro, zinc y colina. Estos nutrientes desempeñan un papel importante en la función cerebral, la salud ocular, la formación de glóbulos rojos y el sistema inmunológico.
La proteína presente en los huevos puede ayudar a promover la sensación de saciedad, lo que puede contribuir a un mejor control del apetito y al manejo del peso corporal. Vale destacar que son un alimento sano que perfectamente puede ser parte de dietas omnívoras y vegetarianas. Son altos en colina, un nutriente esencial que se ha vinculado a la salud del hígado y del cerebro y uno proporciona 169 mg de ese nutriente.
Si incorporas los huevos en tu alimentación diaria, te ayudará a reducir el colesterol malo. Te dará saciedad y ayudará a construir músculo. Vale mencionar que incorporar pocas calorías con muchos nutrientes y proteges tu organismo gracias a los antioxidantes.
Respecto a la cantidad de huevos que se pueden consumir durante el día, algunos especialistas recomiendan uno por día. Vale aclarar que las recomendaciones pueden variar según factores individuales como la salud, las necesidades nutricionales específicas y las condiciones médicas. Por lo tanto, es recomendable consultar a un profesional de la salud o a un dietista para obtener una orientación personalizada.