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Carlos Santana revela cuál es la canción de The Rolling Stones que odia: "no saben en lo que se están metiendo"

El guitarrista confesó durante una entrevista que hay una pista de la icónica banda que no tolera, debido al delicado tema que trata

Carlos Santana revela cuál es la canción de The Rolling Stones que odia: "no saben en lo que se están metiendo"
El reconocido guitarrista ha dejado saber cuál es la canción de The Rolling Stones que odia. Foto: Instagram/@therollingstones/Caurtoscuro/Fernando Carranza García.

Cuando se trata de opiniones sobre las obras musicales, se valora mucho la opinión de grandes figuras como Carlos Santana, quien revolucionó la forma de hacer magia con la guitarra y ahora es una de las más grandes referencias cuando se habla de calidad y talento. Es así como el guitarrista no ha dudado en hablar sobre otras grandes estrellas del rock, siento The Rolling Stones unos de ellos.

Entre las muchas compisiones de la banda británica se encuentra "Sympathy for the Devil", una de las canciones que ha dejado una huella imborrable en la historia de la música. No solo se trata de una de las canciones más aclamadas de la agrupación, sino también de una de las que ha generado mayores divisiones, tanto entre sus seguidores como entre los mismos miembros de la industria musical.

Se sabe que el tema fue lanzado en 1968 y rápidamente se convirtió en un referente del rock de la época, pero también generó una controversia sin precedentes que aún persiste en la cultura popular, pues a través de sus letras, interpretadas desde la perspectiva de un narrador en primera persona, el tema ofrece una visión audaz y provocadora con Mick Jagger encarnando la figura del propio Satanás y relatando hechos históricos que podrían interpretarse como "obras del diablo".

Carlos Santana dice odiar "Sympathy for the Devil" de The Rolling Stones

Desde su lanzamiento, la canción fue vista como una pieza que desafiaba los límites de la moralidad y la ética ya que su mezcla de música y mensaje filosófico-político inquietó a muchas personas, quienes percibieron en ella una apología al mal. No obstante, para The Rolling Stones, "Sympathy for the Devil" era más que una mera provocación; era una crítica a la hipocresía de la sociedad y una reflexión sobre las sombras que acechan en los rincones de la historia humana.

Pero, a pesar de su genio musical, el tema atrajo críticas, tanto dentro como fuera del mundo del rock y uno de los músicos que expresó su desacuerdo con la canción fue el guitarrista Carlos Santana, quien, en una entrevista con el medio internacional "NME", comentó que no compartía la visión de The Rolling Stones sobre el diablo.

No tengo ninguna simpatía por el diablo. Me gusta el ritmo de la canción, pero nunca me identifiqué con la letra [...] Jagger y Richards realmente no saben el alcance total de lo que están hablando. Si supieran en qué se están metiendo cuando cantan esa pista, no lo harían. El diablo no es Santa Claus. Es real, declaró Carlos Santana en dicha entrevista.

Para el músico mexicano-estadounidense, la interpretación del maligno en la canción de los Stones carecía de profundidad y comprensión y es que este desacuerdo es solo un ejemplo de la compleja relación entre los músicos y el concepto de lo "oscuro" en la música popular. Pues a lo largo de la historia del rock, varios artistas han abordado temas como la muerte, la religión, lo sobrenatural y el mal en sus letras, pero pocos lo han hecho con la misma audacia que Jagger y Richards en esta icónica canción.

De acuerdo con expertas en música, la interpretación de Jagger como Satanás no es simplemente una alegoría literaria, sino una crítica mordaz a las estructuras de poder y las injusticias históricas. En este sentido, el diablo es menos un ser concreto y más una representación de la corrupción y la maldad inherente a la humanidad.

A pesar de las críticas y las controversias que ha generado a lo largo de los años, "Sympathy for the Devil" sigue siendo una de las canciones más influyentes de los Rolling Stones y una de las piezas más discutidas en la historia del rock.
Fotografía: Instagram/@therollingstones/Gered Mankowitz.

La influencia del "rock satánico" en la carrera de The Rolling Stones

Para comprender la controversia que generó "Sympathy for the Devil", es fundamental situarla en su contexto histórico ya que a finales de la década de 1960, el mundo estaba experimentando una época de grandes cambios políticos, sociales y culturales. En medio de la Guerra Fría, el movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos, las protestas contra la guerra de Vietnam y la revolución sexual, el rock and roll se había convertido en la banda sonora de una generación en busca de nuevas formas de expresión y desafiar a la autoridad establecida.

The Rolling Stones, conocidos por su actitud rebelde y su irreverencia hacia las normas sociales, se encontraron en el centro de este torbellino de transformaciones. Fue así como "Beggars Banquet", el álbum que incluyó "Sympathy for the Devil", marcó un cambio significativo en el sonido de la banda, pues aunque su música seguía enraizada en el blues y el rock, las influencias de la música psicodélica y experimental comenzaban a ser más evidentes. Así, "Sympathy for the Devil", con su riff de guitarra hipnótico y sus percusiones tribales, no solo reflejaba este cambio de estilo, sino que también se alineaba con las tendencias del "rock satánico" que comenzaban a surgir en la época.

A mediados de los años 60, varios artistas comenzaron a explorar áreas relacionadas con lo oculto, lo diabólico y lo esotérico; bandas como The Doors, Black Sabbath y Led Zeppelin, llegaron a incorporar imágenes de la oscuridad y el misticismo en su música, y algunos de ellos fueron acusados de promover el culto al diablo gracias al llamado "pánico satánico". Sin embargo, el enfoque de los Rolling Stones era diferente ya que en lugar de glorificar a Satanás, "Sympathy for the Devil" utilizaba su figura como un medio para examinar la historia de la humanidad y sus excesos.

¿Qué es el "pánico satánico" dentro del rock?

El "pánico satánico" hace referencia a un fenómeno sociocultural que surgió principalmente en los Estados Unidos durante las décadas de 1980 y 1990, relacionado con el temor generalizado de que la música rock, particularmente ciertos subgéneros como el heavy metal y el glam rock, mismos que estarían vinculados con la adoración al diablo y prácticas satánicas. Este fenómeno fue alimentado por una combinación de paranoia social, creencias religiosas extremas y la estética provocadora de algunas bandas, lo que llevó a una fuerte campaña de rechazo en ciertos sectores de la sociedad, especialmente entre grupos religiosos y padres preocupados por la influencia de la música en las y los jóvenes.

De acuerdo con expertas, el pánico satánico tuvo sus raíces en el temor hacia el ocultismo y el satanismo, que en ese momento se había incrementado debido a una serie de eventos que ocurrieron a nivel global. En la década de 1980, Estados Unidos vivió una creciente tensión por el temor al comunismo, el aumento de la violencia juvenil y una ola de religiosidad conservadora, por lo que en este clima de miedo e incertidumbre, algunos sectores de la sociedad comenzaron a ver estos géneros como vehículos de corrupción moral, debido a su imagen rebelde y, en muchos casos, a la provocadora iconografía de lo oculto y lo satánico.

Pero el pánico satánico no solo estaba relacionado con las letras de las canciones, sino también con las imágenes y símbolos utilizados por algunas bandas. Bandas de heavy metal y rock como Black Sabbath, Iron Maiden, Judas Priest y AC/DC fueron acusadas de promover el culto a Satanás, aunque muchas veces estos símbolos eran utilizados de manera metafórica o simplemente para desafiar las normas sociales. Sin embargo, la percepción pública, alimentada por campañas morales y el fervor religioso, pintó a estas bandas como agentes de la perversión juvenil.

Para muchos, la canción es un testimonio de la genialidad de Mick Jagger y Keith Richards, quienes, al igual que el diablo de la canción, han jugado un papel fundamental en la historia del rock.
Fotografía: Instagram/@therollingstones/Lynn Goldsmith.

Aunque algunos artistas aprovecharon la controversia para desafiar aún más las normas sociales, otros respondieron de manera más medida, aclarando que sus referencias al satanismo y lo oculto eran solo una forma de arte, sin ninguna intención de incitar al mal.

En muchos casos, el "pánico satánico" solo ayudó a aumentar la popularidad de estas bandas, ya que las y los jóvenes se sintieron atraídos por la rebeldía de estas acusaciones y la fascinación por lo prohibido. Algunas bandas aprovecharon el sensacionalismo de los medios para continuar con su imagen provocadora, mientras que otras se distanciaron de la polémica, aclarando sus intenciones artísticas.

De esta forma, "Sympathy for the Devil" es, sin duda, una de las canciones más complejas y controvertidas de todos los tiempos; y a pesar de las críticas y las divisiones que ha generado, su legado perdura, continuando siendo un tema de conversación, interpretación y debate en el mundo de la música.

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