Las impresoras en 3D llegaron para quedarse y sorprendernos con todas las cosas que pueden hacer, y ahora un equipo de investigadores de la Universidad de Maryland imprimieron una mano robótica en 3D capaz de jugar Super Mario Bros en Nintendo.
El objetivo de este proyecto no era jugar videojuegos con una mano impresa en 3D, más bien se trató de una innovación en el campo de la robótica blanda que pretende crear robots flexibles que no necesiten de electricidad para funcionar, sino que puedan operar con aire o agua.
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La idea de esta nueva tecnología es que pueda ayudar en los dispositivos médicos como prótesis, herramientas quirúrgicas y aparatos de rehabilitación.
Hasta ahora cada dedo de una mano robótica necesitaba su propia línea de control pero al imprimirla en 3D con transistores fluídicos integrados puede funcionar con una sola entrada de presión.
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Otro de los beneficios de la estrategia del equipo de investigadores es que es de código abierto.
“Estamos compartiendo libremente todos nuestros archivos de diseño para que cualquiera pueda descargar, modificar bajo demanda e imprimir en 3D todos los robots blandos y los elementos del circuito fluídico de nuestro trabajo”.