La Guerra Fría dividió al mundo en dos grandes bloques, uno alineado con el capitalismo y Estados Unidos y otro con el comunismo y la ex Unión Soviética. En ese contexto histórico en el que se disputaba un nuevo orden mundial, un revelador informe, puso al descubierto que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos espiaba a líderes políticos y artísticos mexicanos en las décadas de 1940, 1950 y 1960.
Según documentos desclasificados, la CIA tenía acceso a las líneas telefónicas de figuras prominentes como Lázaro Cárdenas, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco, entre otros. Esto permitió a la agencia estadounidense monitorear y analizar sus conversaciones y actividades con el fin de influir en la política y la sociedad mexicana.
De acuerdo con los archivos desclasificados, Lee Harvey Oswald, sospechoso del asesinato de John F. Kennedy, habría visitado entre septiembre y octubre de 1963 a un ex agente de la KGB en la embajada de la Unión Soviética en México.
Sobre Lázaro Cárdenas, para entonces expresidente, era calificado por la CÍA como un líder político y espiritual, antinorteamericano y pro comunismo que simpatizaba con los gobiernos de Cuba, China y la Unión Soviética.
Los documentos desclasificados revelan que la CÍA también intervino durante el conflicto estudiantil de 1968, para desestabilizar al país y asegurar su hegemonía internacional.
Este espionaje no solo violaba la soberanía mexicana, sino que también revela la profunda intervención de Estados Unidos en los asuntos internos de México. La CIA buscaba promover sus intereses y objetivos en la región, utilizando métodos clandestinos y manipuladores.
La historia de la relación entre México y Estados Unidos está llena de ejemplos de intervención y manipulación. Desde la ocupación estadounidense de México en el siglo XIX hasta la actualidad, ha habido una constante presión e influencia de Estados Unidos sobre la política, la economía y la sociedad mexicana.
Recordemos que, durante la Revolución Mexicana, el gobierno norteamericano apoyó la rebelión de Bernardo Reyes y Félix Díaz contra Madero, posteriormente coadyuvaron en la caída de Huerta e invadieron Veracruz en 1914.
En este contexto, el espionaje de la CIA durante la Guerra Fría es solo un ejemplo más de la larga historia de intervención estadounidense en México.
Marco Antonio Mendoza Bustamante
@MarcoMendoza_B
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