Por las cifras que presentó el martes pasado el canciller Marcelo Ebrard, responsable de la adquisición de vacunas contra el COVID-19, cualquiera podría pensar que se tratan de cuentas chinas.
Según el funcionario, se prevé obtener 174.2 millones de dosis al cierre del año para vacunar a más de 104 millones de personas, considerando que en algunos casos se aplica sólo una dosis: Con Pfizer se contrataron 34 millones de dosis, aunque sólo se han recibido 766 mil 350 y se han aplicado 677 mil 539; de Astra Zeneca se pre compraron 77.4 millones dosis y se espera el arribo de entre 1.6 y 2.7 millones entre febrero y marzo. De Cansino existe un contrato por 35 millones de dosis, una vez aprobada se espera recibir 8 millones entre febrero y marzo para envasar; de la Sputnik V —que casualmente el mismo martes fue aprobada, lo que causó júbilo entre los funcionarios de Salud—, hay un contrato de 24 millones de dosis; de Serum Institute (Astra Zeneca) existe un acuerdo para adquirir 2 millones de vacunas. ¡Otra misión cumplida del Carnal Marcelo!
Así las cosas, la población que se encuentra angustiada, aterrada, apanicada por el acelerado número de contagios diarios en la capital del país y en otras entidades, puede estar tranquila, bueno, medio tranquila, pues una cosa es que se tengan dosis de vacunas contratadas para proteger a 70% para alcanzar la inmunidad de rebaño, y otra que se apliquen las dosis. Contar en diciembre próximo con 174.2 millones de dosis (algunas compradas, otras pre compradas y unas más contratadas), que presumió el canciller no significa que la mayoría de la población que la requiera vaya a estar vacunada por esas fechas. Aunque el canciller podría argumentar: las vacunas van a estar disponibles en los próximos meses; si quienes las van a recibir se contagian de COVID y mueren, ya no es asunto del gobierno.
Hoy, hoy, hoy, lo único real es que sólo se han aplicado vacunas a poco más de medio millón de personas. Y sobre las 5 etapas de la estrategia de vacunación —que empezaron en diciembre— van medio desfasados.
Te podría interesar
•••
AGENDA PREVIA: Dijo la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, sobre el caso del impresentable e indefendible Félix Salgado Macedonio: “Yo rechazo una conducta machista, patrimonialista, de violaciones graves a los derechos humanos de las mujeres, sobre todo la violencia física sexual, su auto determinación de su sexualidad que puede ser vulnerada gravemente por este tipo de conductas. Por el otro lado, la presunción de inocencia, la garantía de audiencia y debido proceso también está en la Constitución y habrá que respetarlas". ¡No me ayudes comadre!
La empresa FUNO, que dirige Gonzalo Robina, adquirió 100 concentradores de oxígeno de 5 litros que están a disposición de cualquier ciudadano. La entrega de los equipos se hace en la CDMX, con posibilidad de que se amplíe la cantidad. Con este tipo de acciones se demuestra el espíritu humanitario y la política social de la empresa.
POR LUIS SOTO
LUISAGENDA@HOTMAIL.COM
@LUISSOTOAGENDA
mavr