El reloj marcaba las 5:00 horas del 9 de abril cuando Debanhi Escobar bajó del auto que sus amigas le pidieron con la esperanza de que volviera segura a casa. Todas regresaban de una fiesta, pero en ella terminó quedándose en medio de la carretera Monterrey-Nuevo Laredo tras pasar unos minutos con "un contacto de confianza" que la llevaría directo con su familia. Eso nunca sucedió. Lo último que se supo de su paradero es gracias a una fotografía viralizada en redes donde se le ve parada, abrazada por la noche y alumbrada por las luces delanteras de quien debía conducirla hasta su hogar, unos días antes de ser encontrada en la cisterna de un motel.
La imagen de la joven desaparecida inundó internet tan pronto se dio a conocer el caso. Miles de mexicanas que viven en un país donde asesinan hasta 10 mujeres por día compartieron la historia. Todas la entendían. Todas son conscientes de que decidir cómo y cuándo regresar a casa se ha vuelto un tema de vida o muerte.
En las últimas semanas, la desaparición de mujeres en Nuevo León han alzado las alertas en todo el país. El caso de Debanhi terminó por explotar lo que colectivas feminista han denunciado por décadas: en México, la violencia feminicida no da tregua. Tan solo en lo que va del 2022, el gobierno del estado norteño reportó 327 mujeres desaparecidas. Hasta el último anunció, 289 fueron encontradas con vida; mientras otras 33 siguen sin ser localizadas.
“La papa caliente no es reciente y la alerta de género no ha sido atendida”, declaró Eusebia González, titular de la Secretaría de la Mujer en Nuevo León, el pasado 21 de abril. Doce días después de que Debanhi desapareciera cinco mujeres que estaban desaparecidas fueron localizadas con vida, de acuerdo con la Comisión Local de Búsqueda.
La espera de Debanhi: entre el narco y la violencia de género
Debanhi, una joven de 18 años que estudiaba criminología, se arregló para salir de fiesta como otras decenas de mexicanas. Ese viernes 8 de abril la decisión de pasar un buen rato le costaría la vida, pese a que ella salió con la confianza de volver. De acuerdo con los reportes del caso, la mexicana acudió con sus amigas Ivonne y Sarahí a una fiesta en la Quinta Venecia, ubicada en el municipio de Escobedo.
Por la madrugada, sus amigas decidieron abandonar el lugar, pero Debanhi fue recogida en la fiesta y poco después se quedó en plena carretera Monterrey-Nuevo Laredo, un lugar conocido por ser paso importante para el crimen organizado, estar plagado de terrenos baldíos y zonas industriales.
En diciembre de 2021, el gobierno mexicano dio a conocer en la Gaceta Económica que Nuevo León ocupó el tercer lugar entre los estados que aportaron más Producto Interno Bruto (PIB) en todo México, con 8% del total, lo que lo hace uno de los lugares más ricos de todo el país.
Al otro lado del espectro, un estudio de Latia Intelligence y datos de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) informaron sobre la latente presencias de varias organizaciones criminales que se disputan el territorio de Nuevo León, particularmente el Cártel del Golfo, Los Zetas, el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), cuyos brazos se han extendido paulatinamente en el estado.
Fue en medio de este contrastado escenario que Debanhi estuvo sola en la carretera Licenciado José López Portillo tras la fiesta. El crudo contexto en el que se encontraba se conjuntó con otro de los peligros más fuertes para las mujeres: la violencia.
El subsecretario de Seguridad del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), Ricardo Mejía, informó en conferencia de prensa que la joven se encontraba en la carreta alrededor de las 5:00 horas del 9 de abril. Ahí fue donde el conductor "de confianza" tomó la última fotografía conocida de Debanhi.
La ruta de Debanhi y el terror de ser acosada en México
A sus 18 años, Debanhi Escobar marchaba el 8 de marzo para exigir justicia por las mujeres asesinadas y violentadas en México. En una historia de Instagram del perfil que su familia creó para buscarla (debani.escobar) compartieron imágenes de la movilización en la que participó. "Ella gritó por cada desaparecida", escribieron sus seres queridos.
Tras el envío de la foto, no se volvió a saber nada de Debanhi. Su familia tardó apenas pocas horas en comenzar a buscarla y se puso en contacto con las autoridades para reportar su desaparición. A los ocho días, no había rastro de la joven. Su padre, Mario Escobar, dijo en entrevista para Telediario que se hasta ese momento revisó más de 15 videos con la Fiscalía del estado de Nuevo León con la esperanza de encontrar a su hija con vida.
A la par, la Comisión de Búsqueda de Personas de Nuevo León emitió una tarjeta de localización para Debanhi Susana Escobar en la que ofrecieron 100 mil pesos de recompensa para quien proporcionara información sobre el paradero de la joven. La búsqueda comenzó. Voluntarios, drones, perros y todo tipo de equipo se desplegó en el estado para encontrarla.
Finalmente, en uno de los videos, la Fiscalía y los familiares lograron identificar que la joven bajó del vehículo que sus amigas le pidieron en el kilómetro 15.5, a un costado de la empresa de transportes "ALCOSA", muy cerca del motel "Nueva Castilla". Aunque se desconoce la razón por la que Debanhi decidió bajar del vehículo, su padre reveló a medios de comunicación que en una de las grabaciones se captó el momento "en que el taxista, Juan David, extiende la mano a los pechos de mi hija, y de ahí, yo supongo, que mi hija no aguantó el acoso. El fiscal dice que no hay delito que perseguir. Acuso a Juan David Cuellar de detonar todo esto".
La búsqueda termina: ¿Qué le pasó a Debanhi Escobar?
"Trece días aquí ¿Cuántas veces estuvieron aquí?", reclamó a gritos Mario Escobar, padre de Debanhi, en un video captado por la página de Facebook Mafian TV. Casi dos semanas después de la desaparición y los restos de una mujer apenas eran encontrados en la cisterna del Motel "Nueva Castilla", lugar que se había revisado con anterioridad en la búsqueda. Al instante, la noticia comenzó a cambiar la esperanza de encontrar a la joven con vida por una creciente hambre de justicia,
El pasado 21 de abril, la Fiscalía del Estado de Nuevo León informó que el cuerpo hallado en la cisterna del motel podría ser de Debanhi. Para ese entonces, otras cinco mujeres no mediatizadas habían sido localizadas durante la ardua búsqueda de la estudiante de criminología.
Además, la Comisión de Búsqueda dio a conocer que entre la tarde del domingo 17 y el lunes 18 de abril fueron encontradas siete mujeres reportadas como desaparecidas en el estado, cinco de ellas sin vida. Las autoridades del estado revelaron que se trataba de Alexa Elizabeth Ramírez, Danna Ihtalivi Barbosa, Grisela Marcelino Ruiz, Liliana Pérez, Maté García, Patricia Coronado y Jaqueline del Rio.
Por su parte, el cuerpo en la cisterna del motel correspondían con la ropa y accesorios de Debanhi, incluido un crucifijo, elementos clave para la identificación del cuerpo. Un equipo de buzos de rescate sacó a la mujer del agua y la Fiscalía detalló en ese entonces que "no era posible establecer características generales de la persona sin vida". Sin embargo, el padre de la joven mantenía su exigencia de respuestas a las autoridades.
Fue alrededor de las 2:00 horas del 22 de abril que las esperanzas de encontrar con vida a Debanhi Escobar se apagaron completamente. En un video publicado en redes sociales, su padre confirmó que la mujer en la cisterna era su hija. "No llegamos al resultado que el corazón de mi esposa y el mío quería, pedía, exigía. Mi hija está muerta y no sé qué hacer", comentó destrozado. "Estoy molesto porque me equivoqué. Creía en la Fiscalía".
Ese mismo día por la tarde, se confirmó que lo que terminó con la vida de Debanhi fue un fuerte golpe en la cabeza. Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez, el fiscal General del Estado de Nuevo León, informó que tras hacer pruebas en los restos se pudo determinar "que efectivamente se trata de Debanhi Susana, siendo la causa del deceso la contusión profunda de cráneo". Pese al hallazgo, hasta ahora no se tiene una línea de investigación clara, ni se ha descartado alguna variable, pero mientras la familia de la joven llora su pérdida, el gobierno de Nuevo León asegura que perseguirá el caso "con toda la fuerza de la ley".
Debanhi Escobar es una más de las mujeres que han tenido que encarnar la violencia que México no logra detener. Ella, junto con María Fernanda, otra joven que desapareció en Nuevo León, y Victoria Guadalupe, una niña que fue asesinada al salir a la papelería en Querétaro, son apenas algunos de los casos que demuestran que el territorio mexicano no es seguro para la niñas, madres, hermanas o amigas que son obligadas a jugarse la vida todos los días para volver a casa sin convertirse en otra razón más para gritar "ni una menos".
SEGUIR LEYENDO:
Feminicidio en México, cuándo se considera este delito y estadísticas de violencia contra la mujer