Adeudos que ascienden a los 749 millones de pesos por conceptos de pasivos a pagar a corto plazo, además de laudos por juicios perdidos a favor de extrabajadores del ayuntamiento, conforman el déficit financiero que recibió el nuevo gobierno de Morelia, encabezado Alfonso Martínez Alcázar.
A poco más de un mes de su toma de protesta, el alcalde moreliano dio cuenta de las deudas que deben pagarse antes del cierre de año, las cuales calificó como bestiales, luego de que el anterior gobierno morenista dejó 428 millones de pesos en cuentas bancarias para su liquidación, con un déficit de 321 millones sin recurso para pagar.
"Es una brutalidad, un desastre financiero, la crisis financiera es bestial, no es malo tener una deuda bancaria programada, lo malo es tener un pasivo de esta naturaleza de pago inmediato, (…) el dinero de cajas no alcanza para pagar lo que se debe", manifestó.
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Explicó que se encontraron adeudos a contratistas por 37 millones de pesos, con proveedores de bienes y servicios por otros 65 millones y de dudas con terceros no registrados en contabilidad por juicios perdidos por el ayuntamiento por 387 millones con exigibilidad inmediata; en la segunda semana de septiembre un banco embargó recurso de las cuentas municipales.
Martínez Alcázar aseguró que los laudos pudieron ser evitados de litigar de manera correcta las denuncias laborales, pues resaltó que es obligación de los gobiernos en turno velar por los recursos de la ciudad, además calificó de incompetente a la anterior titular de la Secretaría de Tesorería, María de los Remedios López Moreno, y al equipo jurídico municipal.
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De frente al cierre de año y sin la información completa del estado de cuenta de las finanzas del ayuntamiento capitalino, tras el hackeó de las bases de datos de la Tesorería, así como la Secretaría de Urbanismo y Obras Públicas y Administración, el presidente municipal consideró irresponsable el adeudo de millones de pesos sin dejar cuentas claras.
En tanto, anunció que se buscará realizar recortes en insumos administrativos en las diferentes dependencias municipales con la idea de generar economías que se les permitan darle solvencia a los adeudos, aunque previó que algunos adeudos se arrastraran a 2022.