Los hábitos alimenticios determinan mucho del comportamiento de nuestro organismo y su funcionamiento, por ello es muy importante conocer cuáles son los alimentos que le benefician pero sobre todo aquellos hábitos que le resultarán dañinos, en particular a nuestro cerebro.
En lo que respecta al tema de la nutrición, existen algunos hábitos que afectan seriamente el funcionamiento cerebral, considerado de vital importancia ya que alimentarse de manera deficiente puede propiciar no solo el envejecimiento sino también alteraciones en los procesos de aprendizaje. Cabe destacar en este punto que las vitaminas son una fuerte garantía para una adecuada oxigenación del tejido cerebral.
Pero ¿por qué es tan determinante nuestra alimentación para el bienestar de nuestro cerebro? Esto se debe a que el cerebro es un órgano muy versátil por su habilidad de responder ante situaciones del medio ambiente, por lo que de ahí surge su capacidad de recordar y aprender, un aspecto que se le conoce como plasticidad cerebral.
¿Por qué es tan importante la alimentación para nuestro cerebro?
Los ácidos grasos poliinsaturados (como los omega 3) que hallamos en alimentos como el salmón y el aceite de oliva, son fundamentales para llevar a cabo la labor de plasticidad que posee el cerebro, ya que propician que se establezcan nuevas conexiones entre las células del cerebro (neuronas).
Además, no hay que olvidar que la principal energía que necesita el cerebro para funcionar es la glucosa, la cual proviene de comer alimentos ricos en carbohidratos, como cereales, legumbres, frutas y vegetales, así como productos lácteos. Sin embargo, también necesita de otros nutrientes esenciales como son las vitaminas, minerales, ácidos grasos, proteínas, entre otros.
Por lo que un exceso o un defecto del nutriente necesario puede llegar a afectar al sistema nervioso, aunado a que una alimentación desequilibrada puede propiciar carencias específicas de algunos de los nutrientes. Y la manera de manifestarse es mediante síntomas o sensaciones como la apatía, desgana, irritabilidad, nerviosismo, cansancio, falta de atención, fallos de memoria, de concentración e incluso depresión.
3 hábitos que están dañando a tu cerebro
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha enlistado algunos delos hábitos que traen consigo graves consecuencias para el buen funcionamiento del cerebro, entre ellas:
Alto consumo de azúcares: cuando una persona no cuenta con una dieta saludable y balanceada el cerebro se ve afectado trayendo graves enfermedades.
No desayunar: El desayuno es prioritario para el buen funcionamiento del cerebro ya que proporcionará los nutrientes necesarios para contar con la energía necesaria para comenzar el día activo. Comer alimentos adecuados también beneficiará a este órgano. En caso contrario enviará señales de emergencia para obtener ese "combustible", lo que podría traer consigo graves enfermedades como diabetes, obesidad, colesterol alto, entre otras.
Fumar: Uno de los hábitos más dañinos para el correcto funcionamiento del cerebro es el consumo del cigarro ya que afecta el suministro de oxígeno al cerebro. Además que está demostrado que promueve la aparición de enfermedades neurodegenerativas como el Alzhéimer. También se ha dado a conocer que las aminas heterocíclicas (que se liberan durante la combustión del cigarrillo) interfieren con la replicación correcta del ADN, lo que genera mutaciones que dan lugar a células cancerígenas.
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