Los triglicéridos son un tipo de grasa que se localiza en la sangre y se producen siempre que ingieres cualquier tipo de alimento, pues el organismo convierte todas las calorías que tu cuerpo no necesita en triglicéridos, que después son liberados para obtener energía entre las comidas. Sin embargo, si cuentas con niveles elevados de estos lípidos, significa que estás consumiendo más calorías de las que quemas, por lo que puedes presentar problemas relacionados con el sistema cardiovascular.
Los niveles de triglicéridos pueden saberse con una muestra de sangre, misma que podrá demostrar si te encuentras en un rango saludable o no. De acuerdo con la Mayo Clinic, el rango normal oscila en menos de 150 miligramos por decilitro (mg/dl), el límite es de 150 a 199 mg/dl y el nivel alto se da cuando hay de 200 a 499 mg/dl. Sin embargo, todavía hay niveles más altos, una situación peligrosa que considera 500 mg/dl o más (5.7 mmol/l o más).
¿Cuáles son los riesgos?
Los niveles de triglicéridos pueden identificarse como parte de un examen de colesterol ordenado por una persona especialista de la salud. El análisis también puede denominarse "panel lipídico" y "perfil lipídico". Para que pueda realizarse el estudio, la persona en cuestión debe acudir al laboratorio en ayuno, pues solo de esta manera se tendrá una medición precisa a partir de la extracción de sangre.
Si el análisis en cuestión refleja niveles de 500 mg/dl o mayores, las personas corren un alto riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, pues los triglicéridos contribuyen al endurecimiento de las arterias o el engrosamiento de las paredes arteriales. A menudo, estos lípidos son un signo de otras afecciones que también involucran accidentes cerebrovasculares, tales como la obesidad y el síndrome metabólico. Sin embargo, la situación puede controlarse con algunos cambios en la rutina y el estilo de vida.
Recomendaciones
- Haz ejercicio: Realiza una actividad física por al menos 30 minutos al día, mínimo tres veces por semana. Hacer ejercicio ayudará no solo a reducir los triglicéridos, sino que también aumentará el llamado "colesterol bueno".
- Evita consumir azúcar o carbohidratos refinados: Los alimentos que involucren azúcar, harina blanca o fructuosa suelen aumentar los triglicéridos, por lo que es recomendable dejar de consumirlos.
- Evita el sobrepeso: Si comienzas una dieta baja en calorías, disminuirán los triglicéridos, por lo que debes implementar una alimentación balanceada.
- Elige grasas saludables: El aceite de oliva o de canola, el pescado rico en ácidos grasos y Omega 3, el aguacate y algunos frutos secos son la opción ideal para que eleves tu consumo de grasas saludables.
- Evita tomar alcohol: Aunque suene como una medida extrema, este es uno de los pasos más importantes, pues el alcohol es alto en calorías y azúcar, por lo que tiene un efecto importante en tus niveles de triglicéridos.