El Dr. Mike Mew es impulsor de una técnica denominada mewing, la cual consiste en colocar la lengua de manera adecuada para mejorar la forma de la barbilla, nariz y estructura facial.
Para realizar este tipo de actividad no se necesita de utilizar aparatos, sino únicamente de tomar en cuenta cómo se coloca esta parte del cuerpo.
La punta de la lengua se debe colocar detrás de los incisivos, mientras que el resto de la lengua debe tocar la mayor parte posible del paladar la mayor parte del tiempo.
¿Qué beneficios hay en la salud?
Los primeros beneficios de esta postura, indica el doctor Mew, tienen que ver con la mejora en la postura de la cabeza que a su vez inciden en una posición más adecuada en la columna.
Con esta práctica además se mejora la posición de la tráquea, lo cual ayuda a que se tenga una respiración más eficiente.
Otro de los beneficios que promete el doctor es que tanto la mandíbula como la nariz suelen reaccionar favorablemente a estos ejercicios, de tal modo que ambas partes del cuerpo se afilen y definan mejor.
¿Cómo acelerar el proceso?
Las primeras veces que se realiza este procedimiento de colocar la lengua contra el paladar es normal que las personas sufran un poco de dolor, debido a que se está ejercitando un músculo que generalmente está relajado.
En ocasiones, esta molestia ocasiona que muchas personas dejen este tratamiento, por lo que es de utilidad emplear otras técnicas para generar mayor fuerza en la lengua y ayudar a esta parte del organismo a acostumbrarse.
Para realizarla únicamente se necesita un chicle y seguir los siguientes pasos:
- Masca el chicle con todos los dientes hasta que su estructura sea suave.
- Con la lengua pégalo al paladar.
- Usando la misma parte del cuerpo aplánalo haciendo círculos sobre la superficie del paladar.
- Una vez que esté totalmente pegado a la parte superior de la boca, hay que volver a mascarlo con todos los dientes.
- Después de esto se debe repetir todo el proceso por al menos 40 minutos.
GDM
