María Félix fue una mujer reconocida a nivel internacional por formar parte de los íconos femeninos del cine de la Época de Oro, quien logró trascender barreras del éxito por sus peculiares rasgos físicos, considerados como una gran belleza, pero también por su distintivo carácter.
Félix se concibió como una mujer empoderada, fuerte y recia de carácter, por lo que incluso fue apodada como “La Doña”; hasta la fecha, las nuevas generaciones la tienen presente como uno de los íconos más emblemáticos de México.
Al respecto de la vida privada de la actriz, hay poca información más allá de los hombres con los que estuvo; sin embargo, hay diversos hechos que hicieron que la mujer lograra destapar a lo largo de su carrera.
La vida privada de "La Doña"
En este sentido, las personas se preguntan más acerca de la vida privada de la famosa actriz, quien tuvo diversas propiedades a lo largo de su carrera gracias a su dedicado trabajo como figura del cine mexicano.
Te podría interesar
Las más de 40 películas que protagonizó, así como los diversos escándalos en los que estuvo inmersa, como sus cuatro matrimonios y cientos de romances fallidos la persiguen hasta la fecha.
Una de sus facetas más íntimas son aquellas relacionadas a su vida privada y sus casas, las cuales siguen siendo un tema relevante para las personas que la siguen hasta la fecha.
Cabe señalar que la famosa accedió en diversas ocasiones a mostrar estos espacios íntimos a periodistas como a Vicente Leñero tras mostrarle su casa de Polanco, e incluso a través de la televisión “La Doña”, mostró su casa de descanso en Cuernavaca, Morelos.
Su famosa casa de Polanco
La famosa actriz definió el interior de sus diversas casas, mostrando así un amor hacia las antigüedades así como de diversos objetos que datan del siglo XVIII; también era amante de la pintura y la porcelana. Félix, buscó siempre tener piezas únicas que no tuviera nadie más, obteniendo así como resultado ambientes recargados con mezcla de estilos texturas incluso colores.
Su casa más famosa es la que está ubicada en Polanco en el gel 610, siendo así una mansión construida en 1956 luego de que la actriz se casó con el francés Alexander Berger.
Este terreno abarca más de 400 metros cuadrados, destacando así la decoración interna en cada uno de los rincones de la casa de la famosa obteniendo así un espacio lleno de lujo y extravagancia.
Tras la muerte de Félix, en 2002 el inmueble fue heredado por el asistente de María Félix, Luis Martínez de Anda, quien, a su vez, lo vendió en 2012 y en donde se construyó un desarrollo de departamentos.
Y respecto a los objetos, muchos de ellos fueron subastados en 2007 por la casa Christie’s en un total de 7.3 millones de dólares. Los más de 600 lotes de aquella puja incluyeron muebles, obras de arte, colecciones de porcelana, ropa de alta costura e incluso joyas.
HFM