Como ocurre con la moda, la tecnología o las redes sociales, lo que alguna vez fue tendencia se convierte rápidamente en un cliché que rápidamente es reemplazado por nuevas propuestas que se adaptan a casi todos los gustos. Por ello, no es de extrañar que en el mundo del diseño de interiores, suceda lo mismo y aunque aquí no sucede tan inmediato como en otras áreas de la vida, sí resulta evidente cuando alguna decoración está comenzando a morir.
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¿Cuáles son las tendencias de decoración que está a punto de desaparecer?
Tal vez no te has dado cuenta todavía, pero puede que los colores, el mobiliario o el estilo de tu hogar estén desfasados con las nuevas tendencias, aunque lo hayas reformado hace un par de años. Es así como algunas expertas en decoración de interiores nos han regalado sus recomendaciones para deshacernos de esos elementos un tanto anticuados y reemplazarlos por otros más en tendencia y aquí te los presento.
Colores en declive: el adiós al blanco y beige
Durante mucho tiempo, el blanco y el beige fueron los colores predilectos para interiores por su capacidad de iluminar espacios y crear una base neutra. Sin embargo, las expertas subrayan que estos tonos han pasado de moda, dando paso a opciones más cálidas y atrevidas. Los ocres y amarillos inspirados en los años 70, así como el verde bosque y el color terracota, evocan una conexión más profunda con la naturaleza y aportan un toque de nostalgia a la decoración, ya que los espacios totalmente monocromáticos y con una paleta de colores muy neutra han pasado a ser algo aburrido.
Paredes lisas fuera de juego
Las paredes lisas y perfectas están siendo reemplazadas por texturas naturales como el mortero a la cal y la arcilla, ya que estas texturas, acentuadas con iluminación estratégica, crean una atmósfera de refugio y conexión con la naturaleza, una necesidad creciente en los interiores tras el confinamiento.
El estilo industrial en decadencia
Conocido por su estética de fábrica con metales y hormigón, el estilo industrial ha perdido su atractivo debido a que muchas expertas afirman que este estilo puede resultar frío y carente de personalidad, especialmente en su versión más genérica y reproducible. Por otro lado, los cerramientos en negro para separar espacios, característicos del estilo industrial, también han dejado de ser la opción preferida y ahora se buscan divisiones más ligeras, en colores suaves o en acabados de madera con formas curvas, que proporcionan un ambiente más tranquilo y elegante.
Adiós a los cabeceros tradicionales
Si bien fueron un clásico durante muchos años los cabeceros muy grandes y pesados para coronar la cama han pasado a un segundo plano, siendo reemplazados por paredes cabeceras tapizadas de arriba abajo con papeles acolchados o textiles, ya que estos aligeran el espacio, visten más la habitación, son más agradables y mucho más actuales y versátiles que el cabecero tradicional de pared.
Mobiliario de serie: una tendencia en retirada
Los muebles industriales y genéricos, con su apariencia estandarizada y sin huella humana, están siendo reemplazados por piezas que cuentan historias, por lo que se recomienda apostar por muebles vintage o recuperados, que aporten calidez y autenticidad a los interiores modernos. Un ejemplo de renovación es actualizar muebles antiguos de barniz oscuro con acabados claros y mates, añadiendo un toque contemporáneo sin perder su esencia histórica.
El granito pierde protagonismo en las encimeras
Aunque el granito es un material muy valorado por su dureza y practicidad, ya no es la primera opción para las encimeras. Ahora se prefieren otros materiales como las cuarcitas, más actuales y con diseños mucho más elegantes y alegres, y con más personalidad, según las expertas.
Aunque te gusten, estos estilos ya no están en tendencia
El estilo nórdico en declive
Aunque el estilo nórdico tomó mucha fuerza por su estética elegante, ahora se piensa que ya está muy visto, especialmente si hablamos de muebles icónicos como las sillas con patas de madera redondeadas. Por ello, se sugiere optar por sillas de estructura sólida, con cuerpo y acabados mate. Además, recomiendan apostar por tejidos de calidad con fibras naturales y artesanales.
Ramas frescas en lugar de flores secas
De la misma forma, se recomienda cambiar las flores secas de nuestros jarrones por ramas frescas, ya que se piensa que los jarrones con ramas secas dan sensación de tristeza y guardan polvo con el tiempo. Es mejor recurrir a las ramas recién cortadas o a flores que podamos recoger del campo, pues dan una sensación de vida, alegría y de meter la naturaleza dentro de los espacios.
Cortinas ligeras y funcionales
También se menciona que las cortinas de tejidos pesados han pasado de moda, ahora se prefiere vestir las ventanas con tejidos más ligeros, como visillos de lino o algodón en tonos neutros y ligeros, para así poder tener la privacidad necesaria sin oscurecer por completo los espacios.
Azulejos artesanales en lugar de tipo metro
Por último, las expertas destacan que el azulejo tipo metro está siendo reemplazado por azulejos artesanos con formas geométricas y menos lineales, y es que parece ser que estamos viendo espacios que utilizan azulejos artesanos con formas más orgánicas y geométricas, lo que proporciona un toque único y personalizado a cualquier espacio.