La edad no es una determinante para dejar atrás el sueño de seguir creando e inspirando a las nuevas generaciones. Es un momento culminante en la vida, de reconocimiento, en el que la experiencia, la madurez y las vivencias hacen que una mujer se enaltezca por el talento y empoderamiento que ejerce ante los demás.
En el mundo de la moda la juventud ha sido sinónimo de belleza, sin embargo, las reglas han cambiado y nos presentan a mujeres que, sin importar la edad, se han vuelto íconos de belleza a seguir, ya sea luciendo el look de alguna firma reconocida o estando al mando de las mismas.
Iris Apfel, Carolina Herrera, Diane Von Fürstenberg, Anna Wintour y Donatella Versace son algunos de los rostros en la industria de la moda que nos han demostrado que el estilo no muere con la edad.
Iris Apfel
Sus distintivas gafas XL saltaron a la fama en 2005, cuando el MET de Nueva York expuso 80 piezas de su guardarropa, entre las que se encontraban prendas características en el estilo de Iris, así como sus accesorios statement. Desde entonces, la empresaria y diseñadora de interiores, se convirtió en un ícono de la moda, quien a sus 99 años sigue cuativando al mundo entero.
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La modelo nació en el seno de una familia judía de clase media en Nueva York. A los 11 años tuvo su primer outfit, pues fue una niña de La Gran Depresión. Su padre era dueño de una vidriera y su madre de una boutique.
Estudió Historia del Arte en la Universidad de Nueva York, a los 22 años trabajó en Women’s Wear Daily, y fue asistente del famoso ilustrador de moda Robert Goodman.
En 1947 conoció al comerciante Carl Apfel, después de un año de noviazgo se casaron y en 1950 fundaron la compañía textil y de diseño de interiores, Old World Weavers, etapa en la que por medio del diseño y la restauración trabajaron para la Casa Blanca, con diversos presidentes de Estados Unidos.
A sus 97 años, Apfel firmó contrato con IMG, la agencia de modelos que representa a Gigi Hadid, Gisele Bündchen y Karlie Kloss, entre otras super modelos.
La empresaria fue vestuarista y asesora de modas. Además escribió su libro titulado Accidental Icon, tuvo su línea de maquillaje y su propia Barbie de colección.
Carolina Herrera
"Elegancia" es la palabra que representa a la famosa diseñadora venezolana de 81 años, quien se convirtió en la latina más influyente en la industria de la moda.
Hija de Guillermo Pacanins Acevedo quien fue gobernador de Caracas (en ese entonces llamado Distrito Federal de Venezuela) y de María Cristina Niño Passios, fue la segunda de sus cuatro hijos; Carolina creció rodeada de buen gusto gracias a su madre y su abuela, pues desde joven asistió a desfiles de Cristóbal Balenciaga, y la vestían de Lavin para los bailes en sociedad.
A los 18 años se casó con Guillermo Behrens Pacanins con quien tuvo a sus dos hijas mayores: Mercedes y Ana Luisa; sin embargo, años más tarde se separó para que, en 1968 contrajera matrimonio con Reinaldo Herrera, presentador de TV y editor de Vanity Fair con quien procreó a Carolina y Patricia.
Fue hasta los 42 años que la diseñadora creó el imperio que conocemos, con el apoyo de Diana Vreeland, quien era editora de Vogue en Nueva York, cuidad en la que Carolina se estableció.
Como lo ha dicho en diferentes entrevistas, Carolina no estudió diseño de moda, sin embargo, el pilar de su éxito fue su visión e instinto que, desde su punto de vista, es más importante que ‘saber cortar o pegar un botón’.
En 1981 la diseñadora presentó su primera colección en la gran manzana, cautivando al público y a la prensa con la exquicita elegancia que caracteriza tanto sus prendas, como su imagen: siempre impecable y, en la mayoría de las veces, luciendo su tan distintiva camisa blanca, que ha portado por casi 40 años de trayectoria.
Diane Von Fürstenberg
Además de crear una de las firmas más reconocidas en el mundo de la moda, la diseñadora de 73 años pasó a la historia de la industria por la creación del wrap dress, el famoso vestido cruzado que vio la luz en la década de los setenta y que fue símbolo de poder e independencia femenina.
Diane Simone Michelle Halfin (su nombre de pila), nació en el seno de una familia judía, pues su madre fue una sobreviviente del Holocausto y de quien heredó el talento para el diseño.
De pequeña, Diane tuvo la oportunidad de estudiar en diferentes países como Inglaterra y España, sin embargo, para cursar la licenciatura se asentó en Suiza, en donde estudió Economía en la Universidad de Ginebra, lugar en el que su vida daría un giro al conocer al príncipe Egon von Fürstenberg, con quien se casó en 1969 y quien fue una pieza clave para la incursión de la empresaria en el mundo de la moda.
Diane llegó a Nuevo York en 1970 siendo toda una princesa (a pesar de que la familia real alemana no estaba de acuerdo con el matrimonio por su origen judío), sin embargo, a pesar de ser una de las parejas más notables de la época, tres años después, el matrimonio terminó, pero conservó el apellido para darle un impulso a su carrera como diseñadora.
Fue en 1974, con la creación del wrap drees que Diane consolidó su firma, pues en menos de dos años, pasó de producir 15 mil vestidos por semana a 5 millones.
Aunque la firma decayó entre los 80 y 90, en 1997 fue relanzada, con la característica vitalidad de la diseñadora, que se mantiene hasta la actualidad.
Anna Wintour
Considerada como una de las mujeres más influyentes en el mundo de la moda, distinguida por su estilo único que encabeza con el característico corte bob acompañado de las míticas gafas redondas oscuras para sol. A sus casi 71 años, Anna Wintour ha marcado un antes y un después en el mundo de la moda editorial.
En 1988, Anna logró realizar el su sueño de joven: ser editora de Vogue. Wintour creció rodeada en el mundo editorial pues su padre fue Charles Wintour, editor de London Evening Standard, gusto que ella y su hermano Patrick (quien es editor diplomático en The Guardian) heredaron.
Su carrera editorial comenzó en Harper’s And Queen, sin embargo, en los setenta se trasladó a Nueva York para trabajar en Harper’s Bazaar. En 1983 estuvo a un paso de alcanzar su sueño, al incorporarse al equipo de Vogue USA como directora creativa.
La influencia de Wintour en el mundo de la moda, la ha llevado a organizar una de las galas de moda más importantes del mundo, la que se lleva a cabo cada mayo en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, en la que desfilan reconocidas personalidades de diferentes industrias, encabezadas por el mundo de la moda.
La esencia de Anna Wintour llegó incluso al papel y a la cine, pues en el famoso libro de Lauren Weisberger, The devil wears Prada, que posteriormente se llevó a la pantalla grande, aparece un personaje inspirado en Wintour, Miranda Presley, cabe recalcar que la escritora fue asistente de Wintour en Vogue durante un año, lo que cautivó al público y a la crítica, pues la historia no estaba alejada de la realidad.
Donatella Versace
Cabeza y heredera de una de las firmas de moda más reconocidas, grandes e importantes a nivel internacional. Considerada como la mamma de la moda italiana y con 65 años, la diseñadora ha llevado y consolidado el legado de su hermano, el emblemático Gianni Versace.
El gusto de Gianni y Donatella por el mundo de la moda lo heredaron de su madre, quien tenía un taller de costura, sin embargo, fue Gianni quien fundó la firma, siendo su hermana menor su musa indiscutible y su mano derecha.
Fue en 1997, con 43 años, que la diseñadora quedaría al mando de la empresa, después de que Andrew Cunanan le disparara por la espalda a Gianni, afuera de su mansión en South Beach, cuasando conmoción en la industria. Tan sólo un año después de la muerte de su hermano, Donatella consolidaría la empresa bajo su propio selló con su primer desfile de Atelier Versace en el Hotel Ritz de París, con lo que marcaría una nueva fase en la historia de la empresa.
Ella fue la pionera en utilizar a famosos y a celebridades para que usaran sus creaciones dentro y fuera de las pasarelas, lo que fue su mejor estrategia de marketing, llevando a la empresa al siguiente nivel.
A pesar del éxito que Versace representó en su vida, ha sido la misma diseñadora quien, en diferentes entrevistas, ha admitido los excesos y adicciones que han llegado a acaparar su vida. Sin embargo, la diseñadora italiana supo quitarse la sombra de su hermano y, al igual que él, ha trascendido en el mundo de la moda.
Por Daniela Zambrano e Isis Malherbe