En el mundo del arte, una tormenta se está gestando. La reciente subasta de Christie's, titulada Augmented Intelligence, ha desatado una controversia que nos obliga a replantearnos la esencia misma de la creación artística. ¿Estamos ante una revolución creativa o frente a una amenaza para los artistas tradicionales?
La polémica surge principalmente por el uso de obras existentes para entrenar algoritmos de Inteligencia Artificial (IA).
Muchos artistas argumentan que esto viola sus derechos de autor. Sin embargo, ¿no es así como siempre ha funcionado el arte?
Los grandes maestros se inspiraron en sus predecesores, y ahora la Inteligencia Artificial hace lo mismo, pero a una escala sin precedentes.
“La inspiración no es robo, es evolución”, un artista digital anónimo.
Lejos de ser una simple máquina de “cortar y pegar”, la IA se está convirtiendo en un poderoso instrumento en manos de artistas innovadores. Al igual que el pincel o la cámara fotográfica en su momento, la Inteligencia Artificial está expandiendo los límites de lo posible en el arte.
Es innegable que debemos de abordar las preocupaciones éticas sobre el uso de las obras existentes para poder entrenar a la Inteligencia Artificial.
Pero también debemos preguntarnos: ¿es justo limitar el progreso tecnológico y artístico por temor al cambio?
Muchos artistas temen que la Inteligencia Artificial pueda reemplazarlos, afectando sus medios de vida. Sin embargo, la historia nos muestra que las nuevas tecnologías, aunque disruptivas, suelen crear más oportunidades que las que destruyen.
La IA nos obliga a repensar qué significa ser creativo. ¿Es la creatividad una cualidad exclusivamente humana, o puede una máquina ser verdaderamente creativa? Quizás la respuesta esté en la colaboración entre humanos y máquinas.
Como sociedad, nos encontramos en una encrucijada fascinante. La Inteligencia Artificial en el arte no es una amenaza, sino un desafío que nos invita a evolucionar. En lugar de resistirnos al cambio, deberíamos explorarlo con mente abierta.
El debate sobre la IA en el arte está lejos de terminar. Lo que es seguro es que estamos presenciando el nacimiento de una nueva era en la creación artística. Como lo expresó Pablo Picasso: “Aprende las reglas como un profesional, para que puedas romperlas como un artista”. Quizás la Inteligencia Artificial nos está enseñando nuevas reglas que aún tenemos que aprender a romper.
POR ARMANDO KASSIAN
@ARKASMI
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