“Ahora resulta que los que aumentaron el precio de las gasolinas, están pidiendo que bajen”, dijo lapidariamente aquel primero de diciembre de 2018, el entonces presidente López Obrador, echándole un balde de agua fría a una rabiosa oposición moralmente derrotada, que sin memoria y sin argumentos en un último golpe de rabia por haber perdido, lo intentaban interpelar; pues quién no recuerda que durante el sexenio de Felipe Calderón, la gasolina empezó a subir descontroladamente hasta aumentar un 22.9 por ciento, y en el gobierno de cuates, de corruptelas y de frivolidad de Enrique Peña Nieto comenzaron los gasolinazos y la gasolina aumentó hasta en un 42.8 por ciento, al día de hoy. En los primeros tres meses de esta nueva administración, hay una disminución real del 0.04 por ciento.
Es necesario, amigas y amigos, que recordemos también que durante los sexenios de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, la importación de combustibles aumentó en un 500 por ciento, y eso a pesar de las falsas promesas del PRIAN, pues recordemos que en cada sexenio ha habido descubrimiento de importantes yacimientos como Noxal-1 con Vicente Fox, Trión-1 en Tamaulipas con Felipe Calderón, y el Ixachi-1 con Peña Nieto; los cuales, supuestamente, a la par de aumentar la producción, se destinarían a la petroquímica secundaria y la generación de combustibles más baratos en México. Sin embargo, nunca eliminaron el factor más dañino para Pemex: la corrupción.
Todo esto lo mencionamos debido a que la oposición sigue obstinada a su único argumento: la mentira. Hoy ven gasolinazos donde no los hay, se dejan llevar por las fake news, además las alientan y las promocionan, como eso que decían en días pasados al ver largas filas de pipas para transporte de combustible dirigiéndose a la frontera con Estados Unidos: “no que no, como Dos Bocas no funciona, van a Estados Unidos por gasolina”. Su intento de perversidad es inaudito, Pemex hizo un gran negocio en el anterior sexenio y compró la exitosa refinería Deer Park, la cual da grandes resultados en producción de gasolinas en Texas.
Además de eso, la refinería Olmeca en Dos Bocas ya está produciendo y se va a consolidar. Nosotros, en esta Cuarta Transformación, no vamos a engañar al pueblo construyendo una barda y cobrándola como una refinería entera como lo hizo el PAN, mientras el PRI callaba. Nosotros defenderemos la soberanía energética y respaldamos los proyectos de la presidenta Claudia Sheinbaum, porque son para que se vean reflejados en los bolsillos de la gente.
POR SAÚL MONREAL ÁVILA
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