La Encerrona

Romper el monopolio la voz

“Las mañaneras ahora las vamos a desarrollar de una manera especial. Va a venir información como siempre lo hacía el presidente” Claudia Sheinbaum

Romper el monopolio la voz
Adriana Sarur / La Encerrona / Opinión El Heraldo de México Foto: El Heraldo de México

Se puede estar o no de acuerdo, pero es innegable que el expresidente López Obrador marcó su sexenio gracias a su forma de ejercer la comunicación política. Durante más de seis años definió la agenda de la opinión pública y en más de una década era un personaje que habitualmente aparecía en las primeras planas de los diarios nacionales. Guste o no la implementación de las “mañaneras” -desde que fue Jefe de Gobierno- fueron la fuente de titulares y noticias en la presidencia de Fox y en las más de 1,400 de su sexenio era de lo único que se habló desde 2018 hasta el reciente 30 de septiembre.

En este sentido parecería muy fácil de replicar, bastará con repetir la fórmula. Sin embargo, está demostrado que no es así de sencillo, Xóchitl Galvez lo utilizó en campaña obteniendo paupérrimos resultados. De igual manera algunos gobernadores también quisieron implementarlo en sus entidades federativas, pero tampoco tuvieron éxito. Ahora, en la actual presidencia, Claudia Sheinbaum ha seguido con la tradición de su antecesor, pero con ligeros cambios, como colocar reglas claras a las y los asistentes, la duración es menor, temáticas por día de la semana y son más técnicas y serias.

De hecho, las actuales conferencias matutinas están mejor realizadas, cumplen la función pública de informar y también la partidista de seguir adoctrinando a fieles seguidores de la Cuarta Transformación, así como promover que su “Segundo Piso” va avanzando. Empero no ha logrado su objetivo primordial, marcar la agenda pública. Basta ver los titulares en los diarios o los noticieros en la radio, televisión y la información de redes sociales, en la actualidad son diversos, con voces distintas y de temáticas varias. Simplemente el cambio de estilo de la presidenta y el expresidente es la pequeña gran diferencia que impide que Sheinbaum sea la única voz en el debate público.

En esta multiplicidad de voces (que democráticamente está bien), las y los juzgadores del país también han implementado, a partir del lunes, “su mañanera”. Conferencia de prensa que funge de réplica a lo dicho desde el ejecutivo y que se abordan casos generales y específicos acerca de la Reforma Judicial, le dan voz a distintos magistrados, se comunican las acciones de resistencia del Poder Judicial e intentar colocar -su versión- en la agenda pública y que la ciudadanía pueda, con base en la información generada por ambos lados, emitir su propia opinión.

Así, parte de las diferencias del actual gobierno con el que lo precedió es el no monopolio de la agenda pública, mayor cantidad de voces y de temas y no exclusivamente los emitidos desde Palacio Nacional. Es decir, para la democracia es necesario e incluso deseable; sin embargo, para la presidenta Sheinbaum es un golpe de realidad acerca de que la repetición de fórmula no siempre arroja los mismos resultados. También sirve como recordatorio que la opinión pública es multidireccional, generada desde el gobierno, pero también desde la ciudadanía y los medios de comunicación. El monopolio de la voz parece que puede ser una característica de este “Segundo Piso de la Transformación” y eso es una buena noticia para el país. 

POR ADRIANA SARUR 

COLABORADORA   

ADRIANASARUR@HOTMAIL.COM  

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