EL GALEÓN DE MANILA

La disputa de China y Estados Unidos por las Islas del Pacífico

En la Segunda Guerra Mundial, los Estados Unidos apoyados por Australia y Nueva Zelandia, entre otros, pelearon contra el Japón Imperial una serie de cruentas batallas a lo largo de las islas del Océano Pacífico. 

OPINIÓN

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Gerardo Traslosheros / Columna invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En la Segunda Guerra Mundial, los Estados Unidos apoyados por Australia y Nueva Zelandia, entre otros, pelearon contra el Japón Imperial una serie de cruentas batallas a lo largo de las islas del Océano Pacífico. 

Una de las más importantes se libró en Guadalcanal, en las Islas Salomón, que sirvió para detener a Japón evitando que Australia y Nueva Zelandia fueran atacadas. Estas islas, en su mayoría naciones independientes, forman un espacio estratégico desde donde las potencias pueden proyectar su poder.

En mayo de este año, China firmó un acuerdo de cooperación y seguridad con las Islas Salomón, como pretende hacerlo con otras islas, inquietando a EU y aliados de que tal acuerdo derive en una base militar, aunque Beijing niegue que sea su intención. Su militarización en Camboya, Pakistán y el Mar del Sur de China, y sus amenazas a Taiwán, dicen lo contrario. 

China está cercada por bases americanas en Japón, Corea del Sur, Filipinas y Guam (sin contar el apoyo militar a Taiwán). EU y aliados tienen acuerdos militares con varias naciones en la región (Islas Marshall, Palau y Federación Micronesia), pero resisten con firmeza que China los pueda tener. 

El acuerdo China-Islas Salomón es visto como una amenaza por Estados Unidos y aliados, y ha sido criticado como una seria falla de la política exterior australiana. 

Las islas del Pacífico han sido objeto de gran atención diplomática en últimas fechas, con visitas del secretario de Estado americano, Antony Blinken, de la nueva canciller australiana, Penny Wong, y del canciller chino, Wang Yi. Este último completó una visita reciente para promover una iniciativa en materia de seguridad con una decena de islas, pero no tuvo respaldo, al menos por ahora, generando gran preocupación. 

Además de ofrecer acceso a su mercado, China financia vastas inversiones en infraestructura en Kiribati, Papúa Nueva Guinea, Samoa, Islas Salomón, Vanuatu, entre otras, lo que le ha servido como caballo de troya para avanzar sus intereses. Según fuentes, China incita la corrupción como forma de cooptación y busca la erosión de instituciones democráticas para avanzar sus objetivos. 

Como en otras regiones, EU ha cedido la iniciativa a China, lo que ésta ha aprovechado con prontitud, por lo que le es urgente rectificar el camino para ofrecer una alternativa a las islas invirtiendo recursos para apoyar su desarrollo y combatir el cambio climático, lo que les es prioritario. 

Para EU y aliados es indispensable evitar que China establezca bases en la región que apoyen su expansión policía, económica y militar. La trampa de Tucídides, que nos dice que la guerra es inevitable cuando una potencia emergente desafía a otra establecida, se hace presente. El dilema es encontrar formas de coexistencia que aseguren la integración y eviten el conflicto.

POR GERARDO TRASLOSHEROS
UDLAP JENKINS GRADUATE SCHOOL, PECC MÉXICO Y COMEXI
@GTRASLOSHEROS

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