ARTICULISTA

The Milk of Dreams

La curadora Cecilia Alemani trabajó en una muestra que presenta temas como la metamorfosis del cuerpo y las tecnologías

OPINIÓN

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Bernardo Noval / Articulista / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

La curadora italiana Cecilia Alemani ha organizado exposiciones y eventos en todo el mundo, para su última curaduría The Milk of Dreams en la 59ª Bienal de Venecia, muestra un relato que honra a todas las artistas que en ella se incluyen.

En 2017, Alemani también trabajó en la Bienal de Venecia, se desempeñó como la curadora del Pabellón de Italia. Ha organizado numerosos eventos internacionales del mundo del arte, que abarcan desde la dirección de Frieze Projects en Nueva York y Art Basel Cities en Buenos Aires, hasta su incursión en bienales como la de Nueva York y Londres.

El título de The Milk of Dreams (La leche de los sueños), fue tomado de un libro para niños de la artista Leonora Carrington, que, en palabras de Alemani, “habla de un mundo donde las criaturas que son híbridas y en constante metamorfosis pueden transformarse y convertirse en alguien o algo más”.

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Alemani seleccionó la obra de 213 artistas de 58 países, la mitad de ellos están muertos y el 90 por ciento son mujeres, el mayor porcentaje en la historia de una bienal. No es solo un gesto simbólico, también traduce una voluntad de señalar a esas mujeres arrinconadas en el canon como visionarias.

En The Witch’s Cradle, la primera de cinco históricas “cápsulas del tiempo”, la curadora reúne a mujeres surrealistas, aquellas que compartieron parte de la vida del movimiento y otras cuya obra se corresponde visualmente con ellas. Para Alemani era importante que todos los artistas surrealistas fueran mujeres, de hecho, las cápsulas son exclusivas para ellas, porque destaca que en los cuerpos reinventados, las identidades fluidas y las críticas a la autoridad que representan, a menudo también hay una ruptura. Como señala la historiadora del arte Alyce Mahon en el catálogo de la muestra, las surrealistas “tenían como objetivo reeducar a través del reencantamiento”, a menudo adoptando y reinventando las formas y narrativas de los cuentos de hadas.

En The Milk of Dreams se distinguen tres temas: la metamorfosis del cuerpo y la definición de la humanidad. Y en este en particular, pero también en general, la muestra analiza el pensamiento y la filosofía poshumanos, pensando en desafiar la idea ilustrada y renacentista del hombre en el centro del mundo.

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El segundo es la relación entre nuestros cuerpos y las tecnologías. Es un tema muy amplio, que se volvió urgente durante la pandemia, se centra en la idea de que la tecnología, la ciencia y la medicina podrían mejorar y perfeccionar nuestros cuerpos para que podamos vivir más tiempo. Y, por otro lado, está el miedo a una adquisición total de máquinas con inteligencia artificial.

El último tema es la relación entre los humanos y los individuos y la Tierra. Este es, en cierto modo, la extensión del pensamiento poshumano en particular: el pensamiento postantropocéntrico de tratar de imaginar diferentes tipos de relaciones con lo que nos rodea, con el planeta, con la naturaleza, que no es basado en un impulso capitalista, que es extra activista y de explotación, pero que es en cambio no jerárquico, de simbiosis y colaboración entre nosotros y otros seres.

POR BERNARDO NOVAL
CEO MUST WANTED GROUP
@BERNIENOVAL
@MUSTWANTEDG

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