COLUMNA INVITADA

Historia de Perros

La perrita Frida, fallecida en noviembre del presente año pertenecía al grupo de rescate canino de la Secretaría de Marina-Armada de México

OPINIÓN

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Rubén Martínez Cisneros / Colaborador / Opinión El Heraldo de México Créditos: Especial

Los perros son motivo de cuentos, canciones, películas, fabulas, más aún, cargan con un buen catálogo de nombres; Napoleón, Pulgas, Céfiro, Orejitas, Manchas, Firulais, Cachacuas, Pepito, Rusty, Capitán, Guardián, Negra, Travieso, Dante, Luna, Morita, Solovino, entre otros muchos más, además de una variedad de razas que el hombre ha podido domesticar. 

Diversos escritores les brindaron algunos textos, podemos citar al cronista mexicano Ángel del Campo “Micros”, en la narración El pinto contenido en el libro El galano arte de leer, “Chilindrina era una perrita poblana, gordita, muy lavada, muy blanca…siempre dormitando en las faldas de doña Felicia, su ama, que era dueña de un estanquillo Chilindrina, la doncella sin mancha, había tenido amoríos con el Capitán, escuincle horroroso de un zapatero vecino: fruto de esos amores fueron la Diana, el Turco y el Pinto…”, días de gloria y tristeza para el buen animal. 

El escritor ruso León Tolstoi, en su libro cuentos para niños abriga la narración El león y el perrito, enternecedora historia, “En un parque de Londres mostraban fieras salvajes, cobrando por ello dinero o tomando perros y gatos que servían alimento a las fieras. Un hombre quiso ver las fieras, atrapó un perrito se lo echaron al león para que se lo comiera…el león miró al perrito, volvió la cabeza a un lado y a otro y no toco al chucho…Cuando el dueño de las fieras echó al león carne, éste arrancó un pedazo y dejó al resto al perrito…”, una lección de amistad, un final de reflexión.     

El poeta español Juan Ramón Jiménez, en su texto Platero y yo, encontramos el capítulo El perro sarnoso, triste historia, “Venía, a veces, flaco y anhelante, a la casa del huerto. El pobre andaba siempre huído, acostumbrado a los gritos y a las pedreas. Los mismos perros le enseñaban los colmillos…el guarda, que en un arranque de mal corazón había sacado la escopeta…”, como dice Antonio Palomero, “El perro sería el mejor amigo del hombre si tuviera dinero”.    

Otro escritor, que sentían un gran cariño por los canes fue Ernest Hemingway, en julio de 1941, llega a Cuba lugar donde abriga cincuenta y dos gatos y dieciséis perros, en abril de 1958, la policía de Fulgencio Batista, dictador de la isla, asaltan su casa en Quinta Vigía en busca de armas, Carlos Pujol escribe en sus Obras Selectas, “y de un modo accidental matan a culatazos al perro favorito de Hemingway, Black Dog”, 

Como no recordar a los canes capacitados para apoyar en momentos de desastres naturales como sismos y en el rescate de personas atrapadas, entre ellas a la perrita Frida, fallecida en noviembre del presente año la cual pertenecía al grupo de rescate canino de la Secretaría de Marina-Armada de México. 

Alberto Cortez, vertió su inspiración en “Era callejero por derecho propio; su filosofía de la libertad fue ganar la suya, sin atar a otros y sobre los otros no pasar jamás. Aunque fue de todos, nunca tuvo dueño… Vaga su recuerdo por los sentimientos para derramarlos en esta canción” 

Jean Tousseul, dice lo siguiente, “Cuanto más se aprende a conocer al hombre, más se aprende a estimar al perro”. 

POR RUBÉN MARTÍNEZ CISNEROS  
COLABORADOR

MBL