ANÁLISIS

Rumbo a una nueva Legislatura: Ni un paso atrás en la Ciudad de México

Será a partir de la discusión de los temas que polarizan la opinión ciudadana que conoceremos los “verdaderos colores” de quienes conformamos la nueva legislatura

OPINIÓN

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Temístocles Villanueva Ramos / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de México Créditos: Foto: Especial

Los resultados de las recientes elecciones intermedias pueden ser vistos como una renovación del voto de 2018, ya que muestran la voluntad ciudadana de dar continuidad, o no, al proyecto de nación y de ciudad. En el caso de la capital del país, se renovaron poderes locales; el Legislativo con el Congreso de la CDMX, y el Ejecutivo con la elección de las personas titulares de las alcaldías, en ambos poderes con la posibilidad de la reelección. 

Esta configuración política marcará la pauta de la última mitad del sexenio. A pesar del intento de narrativa engañosa de la oposición que promovió el voto útil para detener el avance de las propuestas del gobierno actual, Morena seguirá siendo la bancada mayoritaria en el Congreso de la Ciudad de México, lo cual posiciona a esta bancada como la principal oposición a las y los nueve alcaldes de la coalición PRI-PAN-PRD, y a la vez una importante aliada para el proyecto de transformación. 

La primera legislatura del Congreso de la Ciudad de México, que concluyó en septiembre de 2021, tuvo el mandato de dar continuidad al proceso constituyente, elaborando así las leyes secundarias en materias como educación, pueblos y barrios originarios, reconstrucción, planeación democrática, y en especial la Ley Constitucional de Derechos Humanos, la Ley del Sistema Integral de Derechos Humanos y la Ley Orgánica de la CDHCM. Asimismo, el Congreso local por iniciativa e impulso de Morena, como mayoría, aprobó la Ley de Austeridad, se redujo así mismo el presupuesto y donó recursos financieros al sistema hospitalario para el combate del COVID-19. Promovimos el fortalecimiento del andamiaje institucional para la erradicación de violencia hacia las mujeres, se penalizaron la violencia digital en contra de las mujeres (Ley Olimpia) y la prohibición de las terapias de conversión (ECOSIG). 

También hubo una reestructuración de delitos para su combate e impartición de justicia y se reformó la Ley de Cultura Cívica y la Ley de Movilidad locales. La II Legislatura que arrancó en septiembre tiene una conformación plural, con representación de diversas fuerzas políticas de la Ciudad de México. No obstante, Morena sigue ostentando la mayoría legislativa y la oposición fragmentada, no podrá mantener la alianza conservadora. 

Porque en una ciudad de derechos y libertades, será a partir de la discusión de los temas que polarizan la opinión ciudadana que conoceremos los “verdaderos colores” de las diputadas y diputados que conformamos la nueva legislatura. 

Es por esto que la agenda legislativa de Morena deberá enfocarse en temas progresistas, que defienden y extiendan derechos y garantías de vanguardia. Por mi parte, como legislador de la Ciudad de México, pero con el corazón en la Cuauhtémoc, tomaré el papel de garante del proyecto de transformación desde el legislativo, vigilando de cerca el actual y decisiones del ejecutivo de nuestra alcaldía, respaldando así a mis vecinas y vecinos cuauhtemenses. No permitiremos ni un paso atrás de lo conquistado.

POR TEMÍSTOCLES VILLANUEVA

PRESIDENTE DE LA COMISIÓN DE DERECHOS HUMANOS DEL CONGRESO DE LA CIUDAD DE MÉXICO

MAAZ