COLUMNA INVITADA

La participación ciudadana: ¡Una oportunidad!

Los tiempos han cambiado la manera de hacer política, lo que no varía es el clamor del pueblo de que su voz se escuche fuerte y lejos, y que ésta sea respetada

OPINIÓN

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César Cravioto / Colaborador / Opinión del Heraldo de México Créditos: Especial

Somos parte, desde hace décadas, de la cuarta transformación, del movimiento del presidente López Obrador cuyo lema es ¡No robar, no mentir y no traicionar al pueblo!

El pueblo es el soberano, es quien debe mantener las mayores riendas del poder, es quien pone y quien quita. Es por esto que, a finales de marzo del próximo año, se llevará a cabo la consulta ciudadana de Revocación/ Ratificación de Mandato para preguntar a las y los mexicanos si quieren que el Presidente Andrés Manuel López Obrador continúe en la presidencia hasta finales de septiembre de 2024 o que renuncie.

Es un buen ejercicio que no solo se aplicará en marzo de 2022, sino que quedó establecido en la Constitución, y hacia adelante se aplicará cada tres años, se le va a preguntar al pueblo, que es el soberano y el que manda. Se cumplirá así cabalmente con el artículo 39 de la Constitución en cuanto a que el pueblo tiene en todo momento el derecho de cambiar la forma de su gobierno.

Con este método o referéndum revocatorio, los ciudadanos serán los verdaderos protagonistas de la vida pública del país a través de leyes que han permitido profundizar en la democracia directa y los ejercicios de participación ciudadana.

Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, firmará para la Revocación/Ratificación de mandato de AMLO, y confía en que el titular del Ejecutivo saldrá bien librado de este ejercicio de democracia participativa. “Es el presidente que en 34 meses tiene el mayor margen de aprobación y estoy segura que mucha gente va a firmar y que además, en el momento de la votación, muchísima gente lo hará”, aseguró en días recientes.

En lo sucesivo, como refiere AMLO en su libro A la Mitad del Camino, “nadie podrá confiar en que fue electo por seis años y que, aunque se porte mal y el pueblo lo rechace, se le tiene que soportar hasta el fin de su período, con todo y el daño que pueda causar en la vida pública. Nadie, en ningún nivel de la escala social, económica o política se podrá sentir todopoderoso y dueño de un poder absoluto”.

La Revocación/Ratificación de Mandato es un procedimiento de democracia participativa que nunca antes se había visto en nuestro país; un ejercicio que se ha elevado a rango constitucional para garantizar que los ciudadanos ejerzan su derecho de revocar a los servidores públicos que hayan sido electos y que no cumplan con lo que establece la ley.

Antes de esta reforma un funcionario público sólo podía ser juzgado por traición a la patria, ahora se le puede enjuiciar por cualquier delito como a cualquier otro ciudadano.

Mecanismos como el plebiscito, el referéndum, la consulta popular, la iniciativa popular y la Revocación de Mandato para el Presidente de la República son mecanismos que hoy promueven la democracia participativa y operan como herramientas para poner en práctica lo que se ha llamado concientización continua.

La 4T es dinámica y permite que el pueblo ejerza la soberanía con el combate a la corrupción como el centro del discurso de la actual administración.

No solo se contempla la revocación de mandato para el Presidente de la República sino también para diputados federales y senadores, porque el mismo derecho que han tenido los mexicanos para elegirnos, lo tienen para quitar a quien ha dejado de abanderar los intereses de la colectividad.

La Revocación de Mandato podrá ser solicitada exclusivamente por los ciudadanos, para ello deberá reunirse el apoyo de tres por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores.

Esta cifra debe cumplir el requisito de estar distribuida en al menos 17 estados de la República Mexicana y que representen, como mínimo, el tres por ciento de la lista nominal de electores de cada uno de esos estados.

Los partidos políticos pueden promover la participación ciudadana en el proceso de Revocación de Mandato que estará a cargo del Instituto Nacional Electoral (INE), pero queda prohibido aplicar recursos públicos y privados para influir en las decisiones ciudadanas respecto al tema.

Los tiempos han cambiado la manera de hacer política, lo que no varía es el clamor del pueblo de que su voz se escuche fuerte y lejos, y que ésta sea respetada.

Hoy son mayores las posibilidades de cambio y progreso que las de estancamiento o decadencia como demostraron aquellos que gobernaban con indiferencia y desdén utilizando frases como: “ni los veo, ni los oigo”, de Salinas de Gortari, o aquel: “¿Y yo porqué?” de Vicente Fox; o el: “ya chole con tus quejas”, de Enrique Peña Nieto protagonistas del gran saqueo neoliberal, facilitador de la corrupción sin precedentes en la historia de México.

Con el pueblo todo, sin el pueblo nada, como refiere el Presidente, para poder alcanzar mejores niveles de desarrollo, para que haya menos desigualdad, más felicidad, y prestigio en el concierto de las naciones.

No ha habido en la historia de México un presidente con tanta vocación democrática como AMLO.

Los que están en contra de la Revocación de Mandato se saben minoría, débil y corrupta.

POR  CESAR CRAVIOTO ROMERO
SENADOR DE LA REPÚBLICA POR LA CIUDAD DE MÉXICO
@CRAVIOTOCESAR

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