El 3 de septiembre de 2018, alrededor de las 14:30 horas se registró uno de los ataques más violentos en la UNAM, por parte de grupos porriles que agredieron a universitarios que se manifestaban frente a la Torre de Rectoría, en Ciudad Universitaria.
A cuatro años del brutal ataque, los momentos de angustia, así como las imágenes que evidencian las agresiones e historias de los alumnos heridos, aún permanecen en la memoria de quienes fueron testigos de lo sucedido aquella tarde de septiembre.
¿Por qué inició todo?
Los hechos se remontan al 27 de agosto de 2018, cuando alumnos del CCH Azcapotzalco realizaron una protesta en contra de la directora del plantel, Guadalupe Márquez Cárdenas, ya que fueron retirados injustificadamente algunos murales para la difusión cultural de la institución. En consecuencia, tomaron las instalaciones, bajo las siguientes exigencias:
- Esclarecimiento del presupuesto escolar
- Restauración del acerco mural del colegio, así como el permiso para crear nuevo
- Asignación de profesores y horarios
- Castigo a profesores y administración deficientes
- Esclarecimiento de las exigencias de cuotas por parte de trabajadores
Otra de las exigencias era el esclarecimiento del asesinato de la alumna Miranda Mendoza Flores, alumna del CCH Oriente cuando salió del plantel.
Por su parte, Márquez Cárdenas renunció después de tres días de paro de actividades, en su lugar, Benjamín Barajas, director general del Colegio de Ciencias y Humanidades fue nombrado director interino.
La protesta en Rectoría
Como las demandas no habían sudo atendidas, el lunes 3 de septiembre, los alumnos decidieron marchar desde el Parque de la Bombilla, hasta la Torre de Rectoría de Ciudad Universitaria para presentar su pliego petitorio.
Sin embargo, mientras los alumnos de la Máxima Casa de Estudios se manifestaban de forma pacífica, un grupo de porros apareció en las inmediaciones de Rectoría y comenzaron los ataques hacia los presentes.
Los atacantes agredieron de forma artera y brutal a la comunidad estudiantil con piedras, cohetones, bombas molotov y armas punzo-cortantes, lo cual quedó registrado en fotografías y videos que circularon inmediatamente en redes sociales.
Las consecuencias del brutal ataque
De acuerdo con el pronunciamiento del rector Emilio Graue Wiechers, el resultado de la agresión fue de un grupo de estudiantes con traumatismos menores, en dos casos con lesiones severas, por lo que tuvieron que ser trasladados al IMSS.
Los estudiantes que fueron trasladados a hospitales del IMSS fueron Emilio Aguilar Sánchez, quien era alumno de la Escuela Nacional Preparatoria número 6, y Joel Sebastián Meza García, de la Facultad de Filosofía y Letras.
En ambos casos las lesiones que recibieron pusieron en riesgo sus vidas, Emilio Aguilar, quien en ese entonces tenía 19 años de edad, estuvo internado durante 10 días tras ser apuñalado, con un objeto punzocortante en el glúteo izquierdo, que le dañó la arteria hipogástrica y tras diversas cirugías, se restableció su funcionalidad y su vida dejó de estar en riesgo. No obstante, la agresión comprometió la movilidad de su pierna izquierda, por lo que requirió la transfusión de nueve litros de sangre.
Una fotografía que circuló en redes sociales
Joel Sebastián García Meza, un joven de la Licenciatura en Estudios Latinoamericanos, quien en ese entonces tenía 21 años fue trasladado al Centro Médico Nacional Siglo XXI, pues su estado de salud fue reportado como grave, ya que uno de los porros le enterró un cuchillo por la espalda y con una navaja, le rebanó media oreja.
En ese momento, su novia, una joven identificada como Naomi decidió proteger a su novio únicamente usando su cuerpo, una imagen que circuló en redes sociales, pues en ella se puede observar al porro que aún golpeaba a Joel, quien ya estaba bañado en sangre.
Gracias a la pronta intervención de los médicos, su riñón pudo ser salvado, pero a su llegada, presentó golpes en la cara y cuerpo, su nariz fue fracturada y perdió parte de la oreja, en tanto, Naomi presentó esguince cervical, fractura de nariz y heridas en la cabeza, de acuerdo con información de Andrea García, hermana del estudiante.
Las detenciones
La UNAM informó que se presentaron las denuncias de los hechos en las instancias correspondientes, buscando proceder, sin miramientos, contra quienes resulten responsables por actos de acción o de omisión. En un comunicado, la Máxima Casa de Estudos señaló: "Tenemos evidencias que orientan a señalar que entre los agresores se encuentran los grupos conocidos como 'Treinta y dos', del CCH Azcapotzalco; '3 de marzo', del CCH Vallejo; la 'Federación de Estudiantes de Naucalpan', y otras organizaciones de vándalos conocidos como grupos porriles, que al servicio de intereses externos a nuestra Universidad han asolado nuestras instalaciones en el bachillerato".
Asimismo, Enrique Graue firmó la expulsión definitiva de 18 individuos inscritos en la Universidad y señaló que algunas de las personas identificadas eran ajenas a la UNAM. En este contexto, hasta el 31 de octubre de 2018 sumaron 22 los detenidos por lo sucedido en Ciudad Universitaria.
Hasta esa fecha, se obtuvieron 47 órdenes de aprehensión por los hechos suscitados en la UNAM, de las cuales, 32 fueron cumplimentadas contra 22 personas. Cabe destacar que la identificación de los presuntos responsables fue gracias a las fotografías difundidas en redes sociales.
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