Por su independencia y sus características únicas, los gatos son una de las mascotas favoritas en todo el mundo. De acuerdo con el Inegi, casi 15 millones de este tipo de felinos forman parte de la vida doméstica de los mexicanos.
Sin embargo, la caída cotidiana de su pelo es uno de los retos domésticos más habituales de quienes han elegido a un michi como compañero de vida. Si bien es imposible que un gato deje de soltar pelo, hay algunos trucos para evitar que queden como adorno de tu ropa.
¿Qué es y para qué sirve el pelo en los gatos?
Una de las principales características de los michis es su pelaje. Se trata de un rasgo evolutivo que les permitía, desde tiempos inmemoriales, enfrentarse a las inclemencias del clima, pues tienen la suficiente cantidad para ser caliente en invierno y es ligero para ser fresco en verano, además de servirles como camuflaje perfecto.
De acuerdo con Michael Foss, académico de la Universidad Estatal de Washington, también forma parte fundamental del sentido del tacto de los gatos, por lo que es vital para su salud que permanezca siempre limpio.
Por lo regular, los gatos mudan de pelo cuando el clima es lo suficientemente benévolo, por lo que suelen cambiarlo durante la primavera y el otoño, estaciones en las que puedes encontrarlo con mayor abundancia en prácticamente todos lados.
Para evitar que ese pelo muerto aparezca en tus muebles y en tu ropa, lo ideal es que cepilles una o dos veces al día a tu michi. Además, esto es saludable: de acuerdo con informes hechos por los Centros de Control de Enfermedades en Estados Unidos, acariciar o cepillar a un gato ayuda a relajarte y rebajar los niveles de cortisol en la sangre, con lo que se combate el estrés.
¿Cómo evitar que se pegue el pelo de gato a la ropa?
La electricidad estática juega un papel fundamental en el hecho de que el pelaje de tu gatito se transfiera a tu ropa. También es una de las razones por las que suele ser difícil quitarlo una vez que se adhiere a ella.
Los rodillos con cinta adhesiva son una solución tradicional, efectiva pero costosa al final del día. También existen cepillos especiales, hechos con fibras de poliestireno, que tienen el inconveniente de su rigidez.
Otra solución es frotar tu ropa con un guante de goma, de los que se usan para lavar la ropa, mismo que debes lavar cuando termines de usar. También usar paños húmedos sirve para luchar contra los pelos en la ropa.
Por último, en casos donde es más pelo que ropa, debes remojarla en agua tibia antes de llevarla al ciclo de lavado. También existen detergentes en polvo que emplean la química y la electricidad estática para prácticamente arrancarlos de las fibras. En todo caso, deberás saber que ese es el bajísimo precio a pagar por tener en tu vida a una mascota que, en el Antiguo Egipto, fue adorado como un dios.