A 107 años del fallecimiento de Henry James, aún siguen vigentes sus obras y frases. El escritor estadounidense encontró la muerte en 1916 y fue una de las figuras máximas de la escritura realista. Sus creaciones se enmarcaron casi todas en el género de la literatura gótica y al leer sus novelas, se percibe la sensación de estar frente a una obra de teatro.
La descripción de los escenarios con un nivel alto de detalle y la caracterización psicológica de sus personajes, hicieron que obras como Otra vuelta de tuerca, Retrato de una dama, La princesa Casamassima, Las bostonianas, Los papeles de Aspern y Los embajadores, tuvieran un éxito indiscutido en la literatura.
Frases motivadoras de Henry James
- “Debes salvar lo que puedas de tu vida; no debes perderlo todo simplemente porque has perdido una parte”. Esta frase del escritor es clara: nunca pierdas de vista tus objetivos, ni mucho menos tu fuerza para llevarlos a cabo. Aunque los golpes de la vida sean duros y hayas vivido distintos tipos de pérdidas, debes intentar seguir por lo bueno y positivo que permanece a tu lado.
- “No te preocupes por nada de lo que alguien te diga sobre otra persona. Juzga a todos y todo por ti mismo”. Esta línea del autor hace referencia a no darle importancia al qué dirán. No puedes emitir una opinión de una persona si no la conoces. Asegúrate de entablar vínculos que te permitan tener nociones claras de los demás.
- “La excelencia no requiere perfección”. Esta frase significa que la perfección es algo subjetivo para cada persona. Los triunfos en la vida y las grandes obras a veces nacen de desórdenes, de caos o de un punto de vista individual distinto al de los demás.
- “Tres cosas en la vida humana son importantes. Lo primero es ser amable. Lo segundo es ser amable. Y lo tercero es ser amable”. No hay que explicar nada más de esta frase de Henry James. Los buenos modales, la educación y la cortesía siempre serán las puertas que abrirán grandes oportunidades y vínculos.
- “Hasta que no lo intentas, no sabes lo que no puedes hacer”. Nadie sabe de lo que es capaz, hasta que lo intenta. Todos en algún momento sentimos miedo de llevar a cabo determinados proyectos, pero si no intentamos siquiera mostrarlos, jamás conoceremos nuestro potencial. Esta frase motivadora aplica para todos los ámbitos de la vida.