Las madres y padres primerizos suelen tener muchas dudas sobre su crianza, pues en todo momento buscan lo mejor para sus hijos, sobre todo si se trata de cuidar de su salud; sin embargo, en muchas ocasiones el respaldo científico y de los expertos se contrapone a las creencias de muchas personas. Uno de los mejores ejemplos es la lactancia materna, pues hay familias que prefieren amamantar a los niños hasta el primer o el segundo año de vida, ¿pero esto es lo mejor?, ¿es lo que recomienda la ciencia?
De acuerdo con diversas investigaciones, la lactancia por sí sola debería durar sólo los primeros meses de vida, pues por medio de este alimento se les garantiza una buena salud, desarrollo y supervivencia a los bebés. Por supuesto, esto varía mucho de una familia a otra, ya que hay quienes prefieren alargarla incluso hasta que los niños alcancen los dos años de vida, mientras que otros más que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad la reciben sólo por un par de meses o menos.
Aunque suele ser un tema polémico decidir hasta que edad los pequeños deben ser amamantados, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que desde el 2012 "aprobó el objetivo global de nutrición de aumentar la tasa de lactancia materna exclusiva en los primeros 6 meses de edad" y posteriormente, los bebés deben comenzar a recibir otro tipo de alimentos que los ayuden a desarrollarse correctamente.
"La Organización Mundial de la Salud recomienda que los bebés deben ser amamantados exclusivamente durante los primeros seis meses de vida, y después introducir alimentos complementarios nutricionalmente adecuados y seguros, mientras se continúa con lactancia materna hasta los dos años de edad o más", señala.
La lactancia es un tema personal entre la madre y el bebé, afirma psicóloga
Siguiendo la recomendación de la OMS, la psicóloga Leydy Johanna Gomez Aguilar conversó con El Heraldo Digital para ahondar en los detalles y afirmar que la lactancia materna también se debe de considerar desde lo que la mamá y el bebé buscan y quieren, por lo que también debe ser vista como una decisión totalmente personal a la que tampoco lleguen prejuicios si se decide extenderla después de los dos años.
"La OMS dice que la lactancia materna exclusiva debe ser hasta 6 meses si de ahí en adelante empieza la la alimentación complementaria y habla de una lactancia hasta los 2 años o hasta que la mamá y el bebé lo deseen esto es como la norma general y eso sería la norma general para todos es decir este el tema de la lactancia es una elección personal tanto de mamá como del bebé", aseguró.
En ese mismo sentido, la experta en neuropedagogía explicó que incluso es la madre quien puede decidir hasta qué momento quisiera cumplir su "rol de lactante, de estar promoviendo la alimentación a su bebé". Por otro lado, también se debe dejar que el menor decida hasta cuándo quiere recibir este tipo de alimentación. "Lo ideal y que digamos esto se dé en paralelo no que los 2 ya sé que decía bueno ya está aquí llegan a la lactancia", destacó.
Sin embargo, también se deben tomar en cuenta otros factores que son clave para que una madre decida hasta qué momento debe amamantar a su hijo, ya que muchas veces tienen que separarse de sus bebés para regresar al trabajo o por otras razones que le impiden seguir con la lactancia, aunque así lo quiera.
Sobre lo anterior, la OMS recuerda que la duración de la lactancia materna está asociada con el nivel de ingresos de la madre, pues "el seguimiento a una cohorte de niños 30 años después de su nacimiento, mostró que los adultos que fueron amamantados tuvieron salarios más altos, un efecto que fue mediado por el aumento en los años de escolaridad".
"Idealmente sería de madre e hijo pero pues como te decía las realidades a veces no son como quisiéramos entonces una es una decisión de la madre frente a sus realidades también contextuales", concluye Leydy Johanna Gomez Aguilar.
¿Qué beneficios aporta la leche materna?
Además de tratarse de una decisión personal, se debe tomar en cuenta que amamantar a los hijos también es clave para su correcto desarrollo e incluso para su salud, ya que por medio de la lecha materna se nutre al bebé y también lo protege de enfermedades e incluso de sufrir sobrepeso y obesidad, según datos de la OMS.
"La leche materna es el alimento ideal para los lactantes. Es segura y limpia y contiene anticuerpos que protegen de muchas enfermedades propias de la infancia. Además, suministra toda la energía y nutrientes que una criatura necesita durante los primeros meses de vida, y continúa aportando hasta la mitad o más de las necesidades nutricionales de un niño durante la segunda mitad del primer año, y hasta un tercio durante el segundo año", precisa.
Entre los beneficios más importantes a destacar sobre la lactancia materna, la organización explica que "amamantar por seis meses o más se asocia con una reducción del 19% en el riesgo de leucemia en la niñez", si es que se compara con los bebés que no fueron amamantados o que recibieron el alimento por un periodo más corto.
Amamantar a los pequeños también se ha asociado un un 60 por ciento menos de riesgo de morir por síndrome de muerte súbita infantil, a un aumento a la inteligencia de los bebés y ayuda a prevenir el sobrepeso y la diabetes tipo 2 en la niñez. Finalmente, se sabe que el "apego entre madre e hijo aumenta cuando las madres interactúan con sus hijos mientras amamantan".
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