El estilo de vida de una persona puede ser la principal razón para desarrollar problemas de salud y detonar la aparición de enfermedades crónicas como la diabetes, aunque en otros casos puede ser menos grave y ocasionar colitis nerviosa, por poner un ejemplo. Afortunadamente, en casos como el último es más fácil reducir los factores de riesgo adquiriendo hábitos diarios más saludables.
Al cambiar los hábitos se protege al organismo y se previene que los síntomas empeoren e incluso, a quienes no tienen el diagnóstico de la colitis nerviosa, los puede ayudar a prevenirla por completo. Cabe destacar que todo esto es posible, aunque los expertos desconocen cuál es la causa exacta de esta enfermedad; de acuerdo con MedLine Plus, lo que sí se sabe es que se trata de una “hinchazón (inflamación) del intestino grueso (colon)”.
Por otro lado, los expertos afirman que la colitis nerviosa “se relaciona con el estado emocional del individuo, como una respuesta del organismo al estrés y a una baja ingesta de fibra y agua”, destaca el IMSS. Aunque también se debe tomar en cuenta de qué tipo se trata porque se divide en el síndrome de intestino irritable con constipación, síndrome de intestino irritable con diarrea y el síndrome de intestino irritable mixto.
La buena noticia es que al tratarse de un problema originado en el colon, cambios en los hábitos alimenticios pueden marcar la diferencia y prevenirla, o bien, mejorar los síntomas como el dolor abdominal, los escalofríos, la diarrea, fiebre y deshidratación. Así que si quieres mejorar tu salud y estilo de vida, esto es todo lo que debes de implementar en tu día a día.
De acuerdo con el IMSS, uno de los hábitos a implementar es el aumento en el consumo de fibra, vitaminas y otros nutrientes que “ayudan a corregir el trabajo intestinal”. Entre las recomendaciones de alimentos para ingerir destacan los vegetales, frutas y cítricos, así como los granos y cereales.
Pero como en cualquier dieta y enfermedad, los pacientes deben cuidar todos los alimentos que ingieren en su dieta diaria, ya que algunos de ellos pueden ocasionar daños o empeorar los síntomas. Entre las recomendaciones del personal de salud para los pacientes con esta enfermedad, destaca evitar la ingesta de grasas, leche, picante y otros irritantes como el café, además de incrementar el consumo de agua simple.
Por otro lado, se debe de tomar en cuenta que hay otros factores que se asocian con la colitis nerviosa, como es el caso del tabaquismo y el alcoholismo, por lo que si se busca evitar complicaciones o prevenirla, lo ideal es descartar el consumo de éstos pues son los principales irritantes del tracto gástrico-intestinal.
Asimismo, el mismo nombre de esta afección revela que mejorar el control del estrés -causado por el trabajo, escuela u hogar- es la mejor forma para eliminar la enfermedad. Pero no es lo único a considerar, ya que los expertos también la asocian con conflictos emocionales, como depresión o ansiedad. Finalmente, entre los hábitos a implementar destaca el realizar actividad física e incluso perder peso.
Es importante recordar que antes de implementar algún cambio en la dieta o ejercicio se debe tener la supervisión de un médico, ya que la colitis nerviosa también se relaciona con infecciones, intoxicaciones y la enfermedad de Crohn. Asimismo, en pacientes que presentan sangrado en las heces, perforación en el colon, megacolon tóxico o alguna llaga, se pueden presentar otras complicaciones de salud.
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