Si te preguntas si tu bebé tiene algún problema de tolerancia o dificultad para masticar o tragar, te tengo buenas noticias, pues la mayoría de los bebés hacen esto de manera normal y no solo es natural, sino que es necesario para comenzar con el aprendizaje de la alimentación; es muy raro que sea porque no les agradó el alimento, solo se están acostumbrando a tolerar nuevas texturas y sabores.
Alimentación, más allá de masticar y deglutir
La práctica de alimentarse es un proceso sumamente complejo ya que los bebés tienen que desarrollar habilidades específicas para poder alimentarse de manera correcta.
Primero, necesitan identificar la comida que está sobre su plato, después hacer un contacto visual, conocer mediante el tacto en textura, sensación y temperatura, después generar una coordinación ojo-mano y habilidades motoras para poder agarrar y llevárselo a la boca. Una vez dentro de la boca se necesitan diversas acciones para poder ingerirlo. Los niños nacen con el reflejo natural de masticar y deglutir, pero una maduración en este proceso requiere de un movimiento específico de la lengua, mover el alimento de un lado a otro, el movimiento adecuado de la mandíbula y por último la transición de llevar la comida a la parte de atrás de la lengua y deglutir. Todo esto es un proceso muy complejo.
La alimentación es una experiencia sensorial que depende del desarrollo cognitivo, motor y sensorial.
Enseñanza por medio de la vista
Los niños conectan por medio del tacto y de la vista y muchas veces los necesitan una confirmación de las acciones que están realizando y por eso escupen.
1. Inspección visual; los niños necesitan verificar que lo que han masticado está correctamente triturado antes de deglutir
2. Error motriz,; esto puede ocurrir cuando el niño no ha aprendido a realizar los movimientos correctos de la lengua, boca y mandíbula.
Cuando esto sucede puede que dure pocos minutos, lo observan y lo meten de nuevo a la boca. Es importante recordar que no debemos de hacer ninguna connotación negativa cuando esto suceda.
¿Qué hacer cuando tu bebé escupe algún alimento?
La respuesta más sencilla sería dejarlo ser, intenta no intervenir o demostrar disgusto. Tu hijo está haciendo exactamente lo correcto para aprender las habilidades que se requieren para la adecuada alimentación.
Lo ideal sería reconocer ciertas acciones que está haciendo bien, por ejemplo. ¡Veo que te has llevado una gran cantidad a la boca! ¿Fue demasiado? ¡Wow! ¡Estás haciendo un gran trabajo en el aprendizaje de la alimentación!
Pareciera irrelevante pero cuando se les expone a una explicación verbal sobre sus acciones maduran y aprenden de manera positiva.
JLRM