En uno de los nuevos capítulos de la serie “Black Mirror”, una mujer descubre que su vida inspira una popular serie de una plataforma deliberadamente basada en Netflix. Sin embargo, lo que ve en pantalla no es precisamente de su agrado.
Esta es la premisa de “Joan is awful”, uno de los seis episodios de la nueva temporada de “Black Mirror”, el cual permitió a la actriz mexicana Salma Hayek verse en la pantalla como una versión exagerada de sí misma.
“Fue absurdo y muy divertido al mismo tiempo. Interpretarme a mí misma fue una oportunidad única en la vida. Tuve que explorar los conceptos y clichés que la gente tiene sobre mí y desaprobarlos.
“Fue como si creara un alter ego con el que podría hacer las cosas más desagradables y grotescas que nunca habría hecho en la vida y estuviera autorizada a hacerlo. Fue surreal y creo que solo una mente como la de Charlie Brooker podría generar un concepto de este tipo”, señaló en entrevista.
En el episodio, Hayek interpreta a una estrella de televisión quien se encarga de llevar la vida de Joan, una mujer común, a la pantalla, con las complicaciones que puede tener ese trabajo.
“Interpreto una versión ficticia de mí misma quien, a su vez, interpreta a Joan en el programa de televisión. La vida de esta mujer es totalmente descubierta, y todos los secretos que no quieres que los demás sepan son llevadas a la pantalla, donde interpreto una versión exagerada tanto de mi como de Joan”, detalla.
Momentos sorprendentes
Uno de los motivos por los que Salma Hayek decidió unirse al elenco de la sexta temporada de Black Mirror fue por el hecho de que la serie se ha destacado por impresionar a las audiencias con nuevos tipos de narrativa.
“Una de las grandes virtudes de ‘Black Mirror’ es la habilidad de ser libre y original en un mundo saturado de medios. Por mucho tiempo en esta industria hubo una fórmula a la hora de contar historias y la gente no siempre corría riesgos.
“Ser capaz de preguntarle a Charles Brooke millones de cosas sobre mí, porque el personaje es Salma Hayek, y verlo desde su perspectiva, fue al mismo tiempo un honor bizarro y una situación fascinante”, concluyó.