Este galán de la Época de Oro del cine fue cantante y actor, tuvo una exitosa carrera que lo llevó a grabar una gran cantidad de películas y cantar al lado de otras importantes figuras, como Jorge Negrete, pero tuvo un trágico final al morir en un accidente cuando se dirigía a Acapulco.
Ramón Armengod nació en Veracruz el 10 de octubre de 1909, hijo de padres españoles, desde muy joven mostró su talento para el canto, pero a fin de no disgustar a sus padres, trabajó como dependiente de una joyería. Sin embargo, luego de un tiempo regresó a lo que era su verdadera pasión.
Cuando cumplió 18 años hizo su debut con la compañía de Margarita Carbajal en el Teatro Esperanza Iris, en la Ciudad de México. En cine debutó con las películas "El águila y el nopal" y "Más fuerte que el deber". Su momento definitivo le llegó en 1935, cuando inicia en la XEW el programa "Melodías radiantes" y filma bajo la dirección de Fernando de Fuentes la película "La familia Dressel".
Hacia mediados de los años 30, Armengod ya era una figura popular y conoce a Jorge Negrete a quien invita a presentarse en Nueva York, Estados Unidos, con el dueto musical al que llamaron "The Mexican Caballeros", proecto que no duró mucho tiempo y por el que el galán del cine regresa a México.
En México colocó varios éxitos como cantante, entre ellos "Prisionero del mar", "Palabras de mujer", "La última noche", "Bonita", además de estrenar varias canciones de Agustín Lara, como "Mujer". A la par, grabó películas en las que compartió créditos con figuras como Germán Valdés Tin Tan, Virginia Serret, Emilia Guiú, Meche Barba y Rosita Quintana; entre muchos otras.
Ramón Armengod y su fatal accidente
A fines de los años 50, teniendo todavía mucha fama y popularidad, "El chansonnier de moda", como era llamado, decide retirarse por unos años. Regresa en los años 60 para actuar en un proyecto que él mismo produce y escribe: "Bajo el imperio del hampa" (1968), y en 1975 tiene una participación especial en el filme "Mary, Mary, Bloody Mary".
Pero cuando estaba retomando su carrera el destino le tenía preparado un trágico final, pues en 1976 mientras se dirigía a Acapulco, tuvo un accidente automovilístico en el que murió. Algunos aseguran que el fatal impacto, que se dio a la altura de Chilpancingo el 31 de octubre, se debió a un paro cardíaco; el actor tenía 67 años.
