Otro escándalo se cierne sobre la realeza británica: Meghan Markle podría ser llamada a declarar en una demanda contra el príncipe Andrés, presentada por Virginia Roberts Giuffre, quien acusa de abuso sexual al difunto Jeffrey Epstein.
El hijo menor de la reina Isabel II está involucrado en la trama de Epstein y Ghislaine Maxwell, quienes abusaron de decenas de menores de edad aprovechándose de su fortuna e influencia.
El abogado de Roberts Giuffre aseguró que ante la imposibilidad de llamar al estrado a otros miembros de la realeza británica, la esposa del príncipe Harry estaría obligada a acudir bajo la legislatura estadounidense.
"Es alguien con quien podemos contar para decir la verdad", dijo el abogado David Boies sobre la duquesa de Sussex.
Hay que recordar que Meghan Markle es ciudadana estadounidense y vive en la Unión Americana. Sería la elegida para testificar sobre las acciones de Andrés, a pesar de que se separó de la realeza hace varios años.
Además de su ciudadanía, Boies explicó las razones por las que habría considerado llamar a declarar a la exactriz de Hollywood:
- “Era una colaboradora cercana del príncipe Andrés y, por lo tanto, está en condiciones de haber visto lo que él hizo”.
- “Debido a su asociación pasada con él, es muy posible que tenga conocimientos importantes”.
- “Sería solo para ver si hay personas cercanas a él que tengan conocimientos relevantes”.
“Ella marca las tres casillas”, acotó.
Andrés ha sido señalado en más de una ocasión como una persona cercana a Epstein. Para muchos pudo estar involucrado como testigo o como parte activa de las fechorías del ex ejecutivo de Wall Street.
De concretarse, sería histórico que una figura preponderante de la realeza británica tuviera que sentarse en un estrado de la corte estadounidense.
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