El legado de Armando Manzanero lo respalda un Grammy, dos Grammys Latinos y un premio Billboard, así como más de 400 canciones que han sido interpretadas por distintos artistas como Luis Miguel, Alejandro Fernández, Lucero, Miguel Bosé, Lisset, Carlos Cuevas o Miriam Solís, pero la música no es su única pasión.
Hoy celebra su cumpleaños número 85 y sus amigos nos relatan que tiene un paladar exquisito que deleita disfrutando de la comida de los mejores restaurantes, cuando está de viaje, o de platillos que él mismo prepara en su casa para él o sus invitados que tienen el honor de visitarlo.
“Es increíble llegar a su casa y envolverte en el olor de la comida. Verlo con su gorrito de chef, cocinando una sopa de lima con venado, es lo mejor. Te recibe con puros de manzanero y la mejor melodía. Su cocina es aún mejor, todo lo tiene acomodado por tamaños, desde las palas, hasta las cacerolas, es todo un placer visitarlo”, comentó Lisset, quien lo conoce desde hace 24 años.
El maestro apadrinó su carrera como cantante, al invitarla a grabar “Nada personal”, desde entonces descubrió su amor por la buena comida. La intérprete recuerda que trabajaron en dicho tema durante 10 días en Los Ángeles, y al finalizar iban al mejor restaurante chino y siempre lo ha visto cuidar su alimentación.
Otra de las cosas que disfruta Lisset del compositor mexicano es su humor negro, educación y cariño, ya que siempre la ha tratado como a una hija. Este mismo sentimiento ha vivido Miriam Solís, quien en 2019 presentó el disco “Feria de amor”, material que grabó con el autor durante dos años.
“El maestro ha sido paciente conmigo, me ayudó a tener seguridad, porque al principio estaba nerviosa. Y es que él cuida cada detalle de su trabajo, en este álbum tardamos dos años, porque pulió cada detalle, pero también es un ser humano increíble. Los días que la grabación se alargaba, mandaba a comprar comida para todos, es muy sencillo”, mencionó.
Solís agregó que además de compartir su tiempo de manera profesional, Manzanero también la trató como a una hija y hasta le dio consejos de amor, para que no llorara por ningún hombre.
“Fue la única vez que lo vi molesto, y lo entiendo, porque estaba perdiendo el tiempo. Yo había llorado toda la noche, tras terminar con mi novio y mi voz no era la misma. Entonces él me preguntó que qué me pasaba, le dije y paró todo, les dijo a todos que se fueran, lo noté molesto, pero cuando fui a su oficina, fue muy amable y hasta consejos me dio”, contó.
Carlos Cuevas también ha tenido la oportunidad de trabajar con él en varias ocasiones y entre las cosas que recuerda que no le gustan al compositor es que la gente lo invite a su casa y cuando llegue, le pidan que cante.
“Recuerdo que le preguntaban cómo le haces para que no se te suba(la fama), porque es muy sencillo, y siempre contesta que no se la cree, es un señor sencillo, un grande de la música. Es el último valor del romanticismo para el mundo”, afirmó.
Sobre su vida
- El compositor comenzó a estudiar música a los ocho años de edad en Bellas Artes de su ciudad natal.
- En 1951 inició su carrera como pianista, después entró a trabajar como director musical de una compañía disquera.
- En 1962 se posicionó en el quinto lugar del Festival de la Canción en México.
- En 1993 la revista Billboard le dio el Premio a la Excelencia por su trayectoria artística.
- En el 2001 ganó el Latin Grammy al mejor dúo o grupo pop vocal por su disco “Duetos”.
- 1950 escribió su primera melodía “Nunca en el mundo”.
- 2010 fue nombrado presidente del comité directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM).
- 7 canciones ha hecho para telenovelas.
- 1996 compuso “Nada personal” y la interpretó con Lisset.