Los autos de Sean Connery como James Bond son una parte clave de las películas. Hermosos, rápidos y llenos de gadgets eran los autos que le ayudaban a eliminar a villanos como el Dr. No, Francisco Scaramanga y Oddjob.
Los autos de Sean Connery
El Aston Martin DB5 es el coche Bond por excelencia. Es el protagonista de seis películas de la saga con diferentes actores. Sean Connery lo hizo famoso desde el primer momento.
En Desde Rusia con amor, Connery conduce un fabuloso Bentley Drophead de 1935. Además de la elegancia, este auto tenía adecuaciones proporcionadas por Q, incluido un teléfono portátil.
Diamantes para la eternidad se estrenó en 1971. Allí, el actor escocés presume un Mustang Mach. Ese largometraje fue el regreso de Connery como James Bond, tras la participación de George Lazenby. La trama lleva a Bond al desierto de Nevada, en una todavía poco conocida Las Vegas.
El primer auto que usó Sean Connery fue el Sunbeam Alpine Roadster, uno de los modelos británicos más icónicos de los años sesenta. Este auto se vio en la película 007 contra Dr. No.
En Sólo se vive dos veces conduce un maravilloso Toyota 2000 GT Special Cabriolet. Un dato curioso es que sólo habían dos ejemplares de este modelo en todo el mundo.