La secretaria de Energía, Rocío Nahle, defendió la política energética que ha tomado la administración federal, tras el reclamo de funcionarios de Estados Unidos.
En el marco de sus atribuciones el Gobierno federal implementa un adecuado balance energético dentro del territorio nacional. La relación con Estados Unidos dentro del T-MEC en materia de energía es de respeto a las normas constitucionales de cada país, así quedó especificado en el tratado, dijo la funcionaria en sus redes sociales.
Ello porque los funcionarios Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos; Dan Brouilette, secretario de Energía de ese país; y Wilbur Ross, secretario de Comercio de ese país, enviaron una carta al gobierno mexicano cuestionando las decisiones tomadas en materia energética, desde la llegada del presidente Andrés Manuel López Obrador y argumentando posibles violaciones a las obligaciones del T-MEC.
La carta está dirigida a Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores; Rocío Nahle, secretaria de Energía; y Tatiana Clouthier, secretaria de Economía.
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En el documento el gobierno de Estados Unidos acusa que estas decisiones han generado incertidumbre que afecta el ambiente de inversión en México.
La Unión Americana cuestionó el bloqueo de permisos para el desarrollo de proyectos de energía por parte de la industria privada, y utilizar a los organismos reguladores para beneficiar a las empresas estatales del sector energético.
Esto sería profundamente problemático y suscitar preocupaciones con respecto a los compromisos de México bajo el T-MEC, advierte la carta.
En el T-MEC se establece un marco de apertura en el mercado energético, donde México mantiene su soberanía, también se obliga a los integrantes de acuerdo a contar con organismos reguladores sectoriales independientes y autónomos.
Por: Adrián Arias