La temporada 2024 de la NFL se ha caracterizado por la precisión de los pateadores, con una tasa de conversión del 84,9 porc ciento en goles de campo, casi idéntica al 85.9 por ciento de la temporada anterior y una de las más altas de la historia, según reportan las estdísticas de la misma liga.
Señalan también que, la efectividad en intentos de más de 50 yardas ha alcanzado el 71.9 por ciento, un dato impresionante si se compara con los bajos porcentajes por debajo del 40 por ciento de hace tres décadas. Sin embargo, para algunos equipos, esa "era dorada" está siendo opacada por una serie de fallos inesperados de pateadores clave, lo que genera preocupación en equipos como Baltimore, Filadelfia y Cincinnati.
Justin Tucker de los Baltimore Ravens, considerado por muchos como el mejor pateador de todos los tiempos, es el rostro de esta crisis. Con cinco selecciones All-Pro en su haber, Tucker había sido una garantía para los Ravens durante la mayor parte de su carrera, pero esta temporada ha fallado seis goles de campo.
Uno de sus fallos más notables ocurrió hace dos semanas, cuando falló un punto extra en un partido crucial contra Cincinnati, aunque luego se redimió con un gol de campo de 56 yardas que empató el encuentro, el cual los Ravens terminarían ganando en tiempo extra.
Justin Tucker y otros pateadores estrella enfrentan una temporada difícil en la NFL 2024
La situación no es menos complicada para Evan McPherson, el joven pateador de los Cincinnati Bengals, quien en 2021 había brillado con un desempeño impecable en situaciones de alta presión. Sin embargo, esta temporada ha fallado varias oportunidades clave. El domingo pasado, en un enfrentamiento decisivo contra Los Angeles Chargers, McPherson falló intentos de 48 y 51 yardas en el último cuarto, lo que terminó costándole la victoria a los Bengals, quienes cayeron 34-27.
En Filadelfia, Jake Elliott ha vivido una temporada similar. Aunque los Eagles mantienen una racha ganadora de seis partidos, el pateador ha sido inconsistente. En la reciente victoria sobre Washington, Elliott falló dos goles de campo y un punto extra, lo que ha generado incertidumbre en un equipo que, a pesar de su éxito, no puede permitirse más errores en posiciones clave.
El panorama se completa con otros pateadores que también han tenido dificultades. El caso de Harrison Butker, de los Kansas City Chiefs, es significativo: aunque ha mostrado una buena puntería, una reciente cirugía en la rodilla ha puesto en duda su capacidad a largo plazo. Por otro lado, McPherson y Hopkins, de los Bengals y los Arizona Cardinals respectivamente, han fallado seis goles de campo cada uno, lo que deja claro que no se trata de un caso aislado.
A pesar de estos problemas, aún queda tiempo para que algunos de estos pateadores encuentren su ritmo antes de los playoffs, pero para equipos como Baltimore y Filadelfia, el tiempo apremia. Ambos se encuentran entre los principales contendientes y no pueden permitirse que los errores en la patada los afecten en momentos clave.
Si la era dorada de los pateadores sigue siendo una promesa, la realidad actual ha puesto de manifiesto que la estabilidad en esta posición sigue siendo más incierta de lo que muchos imaginaron al comenzar la temporada.
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