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México y Polonia: dos líderes regionales que cumplen 95 años de amistad

A lo largo de casi un siglo, la relación diplomática de ambos países se ha caracterizado por la cooperación mutua

CULTURA

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La comunidad de México en Polonia celebró la Independencia con una jornada cultural y gastronómica, encabezada por el embajador Juan Sandoval. Créditos: El Heraldo de México

México y Polonia somos dos naciones con raíces históricas, coincidencias sociales e importantes momentos compartidos; mucho más cercanos de lo que a la luz de la geografía se podría pensar.

Los primeros contactos diplomáticos entre los gobiernos de México y Polonia durante el siglo XX se dan en el marco del resurgimiento de Polonia como un país independiente en 1918, y la época posrevolucionaria de México. El presidente Álvaro Obregón anuncia en su informe de labores del 1 de septiembre de 1921, que México ha reconocido a Polonia como país independiente.

Un representante diplomático polaco, el príncipe Albert Stanislaw Radziwill, viaja desde la legación polaca, en Washington D.C., para asistir a los festejos del Centenario de la consumación de la Independencia de México, en 1921. Pero no es sino hasta 1928 cuando se concreta el establecimiento formal de relaciones diplomáticas. Cabe destacar que ambos países se encontraban en complejos procesos de consolidación institucional en la década de los 20.

Polonia acepta la propuesta mexicana de establecer relaciones diplomáticas y se comprometen a abrir representaciones recíprocas, inaugurando Polonia su legación en la Ciudad de México en 1928 y México la suya en Varsovia en 1933.

En 1930 México y Polonia firman un tratado de amistad, comercio y navegación, que es la base jurídica inicial para la relación bilateral. México se opuso en 1939 a la ocupación nazi de Polonia y mantuvo relaciones con el gobierno polaco en el exilio, porque representaba a un pueblo que luchaba por su soberanía y su libertad. Por ello, México recibió la visita del general Wladyslaw Sikorski, primer ministro de Polonia, en 1942, ocasión en la que ambos países acordaron que México recibiría hasta 30 mil refugiados polacos, entre los que destacaron mil 453, infantes huérfanos, quienes se conocieron como “los niños de Santa Rosa”, por el nombre de la Hacienda que los acogió en el Estado de Guanajuato.

Al concluir la Segunda Guerra Mundial, México fue el primer país de América Latina que reconoció la estructura del gobierno provisional de unidad de la República Popular de Polonia, en julio de 1945, reiniciando las relaciones diplomáticas.

En 1960, México y Polonia decidieron reabrir sus representaciones diplomáticas a nivel de Embajada, intensificaron sus vínculos en los campos cultural, académico y deportivo. El presidente Adolfo López Mateos realizó una visita de Estado a Polonia en 1963, acompañado de una gran exposición en el Museo Nacional de Varsovia.

SoboTaco busca que haya presencia de productos mexicanos en comercios y restaurantes. (Créditos: cortesía Embajada de México en Polonia)

La visita del Papa Juan Pablo II a México es, quizá, uno de los momentos en donde los pueblos de México y Polonia se sintieron más cerca y se conocieron mejor. La visita del Sumo Pontífice polaco a ambos países, en 1979, generó un acercamiento cultural y religioso sin precedente entre los dos pueblos, ya que las giras fueron ampliamente transmitidas por la televisión en ambos países.

La evolución política en Polonia, iniciada en la década de los 80, con el movimiento libertario del sindicato Solidaridad, fue seguida con gran interés en México, toda vez que representó una etapa transitoria hacia el fin del comunismo en los países bajo influencia soviética y de los regímenes marxistas-leninistas.

La mayor apertura política de Polonia y su transición hacia la economía del mercado coincide con la apertura económica de México durante la década de los años 90, produciéndose un acercamiento político de ambos países, y un diálogo entre dos naciones que viven una renovación democrática en los albores del siglo XXI. Se da el inicio del comercio bilateral de gran escala.

México recibió la visita del primer ministro de Polonia, Jersey Buzek en 1998, seguida de visitas de cancilleres de ambos países. En 2004, el presidente de México, Vicente Fox, realizó una visita de Estado a Polonia, en el mismo año del ingreso de pleno derecho de Polonia como miembro de la Unión Europea.

México es un país que fraguó su existencia en los valores más profundos de la libertad, de la igualdad, de la democracia, que posteriormente dieron lugar a la consolidación de principios o reglas para las relaciones entre los Estados como son la libre determinación de los pueblos, la no agresión, la no adquisición del territorio por la fuerza, la no intervención, la igualdad jurídica de los estados y, en general, el respeto de principios del derecho internacional como garantes de relaciones de paz y de amistad.

Durante el último año en el que hemos vivido la invasión y agresión de Rusia contra Ucrania, resulta muy relevante que México haya refrendado esos principios de derecho internacional, apegados a la independencia y al respeto al derecho ajeno, que orgullosamente México siempre ha defendido. El papel activo y sumamente constructivo que México tuvo como miembro electo del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha quedado como prueba patente de la consistencia de nuestras posiciones.

En este marco sostuvimos, en julio de 2022, el XII Reunión del Mecanismo de Consultas Políticas entre México y Polonia a nivel viceministro, en la Ciudad de México, el primero que se celebra después de varios años.

El presidente de Polonia, Andrzej Duda, en México, en 2017. (Créditos: Cuartoscuro)

Si bien la pandemia ha ralentizado las relaciones internacionales de todos los Estados, nos encontramos en un excelente momento para relanzar todos los aspectos que conforman nuestra relación bilateral. A casi 20 años de la membresía polaca de la Unión Europea podemos decir que el potencial de cercanía con México no ha sido suficientemente desarrollado.

Vale la pena mencionar que en los últimos 20 años el comercio se ha multiplicado por más de 20, sin embargo, no se encuentra al nivel que podría tener para dos países del tamaño de México y de Polonia, que cuentan con herramientas de cooperación comercial como los tratados de asociación que México ha celebrado con la Unión Europea y que alcanzan un desarrollo industrial destacado en áreas similares como la industria automovilística, las nuevas tecnologías, la electromovilidad o la industria aeroespacial.

Actualmente, Polonia es la quinta economía de la Unión Europea y es sólo el 12o socio comercial de México en la región. Un comercio bilateral que, si bien supera los 3 mil millones de dólares al año, según datos de 2022, no pareciera estar aún a la altura del potencial que representan ambas economías.

Los niños de Santa Rosa, refugiados en 1942. (Créditos: cortesía Colección Peter Chrabolowski Gordon)

Necesitamos que gobierno y sector privado tengan auténtica voluntad para impulsar las sinergias que generen prosperidad para nuestras empresas y nuestros pueblos. La adopción y entrada en vigor del acuerdo modernizador entre México y la Unión Europea es el acervo fundamental de oportunidades que nos permitirá profundizar en esa relación económica bilateral que debemos tener.

En 2022, más de 66 mil polacos viajaron a México y en 2021, fueron 60 mil. Ojalá que en los años siguientes sean más y que su estancia en México sea enriquecedora y que también más mexicanos visiten Polonia. Nuestra cooperación educativa y cultural es intensa y se va a intensificar más. Tenemos una amplia gama de convenios celebrados y abarcamos a las principales universidades de ambos países, sin embargo, siempre se puede ampliar. Este mes adoptaremos el Programa ejecutivo con vigencia para los siguientes cuatro años. En materia de cooperación técnica y científica, México y Polonia tenemos grandes coincidencias que hasta la fecha no han sido suficientemente profundizadas.

La diplomacia parlamentaria es una veta muy importante de la relación política que espero que nuestros respectivos poderes legislativos profundicen. En 2022 iniciamos usando como punta de lanza para promover nuestra presencia en la gastronomía, la mesa de las familias polacas, porque vemos que en Polonia —como en México— la cocina tiene un lugar preponderante. Siendo la cocina mexicana Patrimonio Inmaterial de la Humanidad desde 2010 iniciamos una campaña para invitar a que todos los polacos coman tacos todos los sábados. 

La campaña “SoboTaco” (inspirada en Sobota, sábado en polaco) ha sido muy bien recibida y es un instrumento que busca que los restaurantes, supermercados y las familias tengan presente los productos mexicanos al menos un día a la semana.

El arte, incluyendo la música y las artes plásticas mexicanas, generan gran interés en Polonia. Por ello, en 2023 tendremos una gran presencia cultural en Varsovia, conmemorativa de nuestro 95 aniversario, con un amplio programa que incluye la presentación de cuadros de Frida Kahlo en el Palacio Real Lazienki de Varsovia, esculturas de Juan Soriano en Cracovia y ciudades mexicanas Patrimonio de la Humanidad en la principal avenida de Varsovia.

No hay distancia, ni diferencia que no pueda ser superada cuando existe verdadera voluntad. Esta voluntad es la que necesitamos reforzar en la relación de México, líder en América latina, con Polonia, líder en Europa Central. 

Consolidar la relación mutua estratégica planteada por los dos países durante la visita del presidente Andrzej Duda a México en 2017, es una tarea pendiente a la que debemos dar la mayor importancia. México y Polonia merecen que forjemos una amistad más profunda y una relación más dinámica; nos sabemos cercanos, nos admiramos, no tenemos diferencias divergentes, sino coincidencias y un gran potencial para que, juntos, siendo amigos y socios cada vez más cercanos, generemos mayor bienestar para nuestros pueblos.

PAL