Miles de personas han contribuido, de una forma u otra, a la consolidación de la iglesia católica a lo largo de los siglos, ya sea predicando el evangelio o manteniendo concilios que han permitido refinar tanto las ideas como las formas de veneración.
Uno de ellos, San Sacerdote de Lyon, ayudó a consolidar la fe cristiana en las Galias antes del reinado de Carlomagno, reconstruyendo dos de las iglesias más importantes en la ciudad que pertenece hoy a Francia.
¿Quién fue San Sacerdote de Lyon?
De acuerdo con los más antiguos registros de los Martirologios de Lyon y de San Jerónimo, San Sacerdote de Lyon nació en el año 487, en una familia noble cuando la ciudad era habitada por los borgoñones.
Durante el tiempo en el que fue nombrado obispo, los religiosos aún podían tener hijos, por lo que tener uno no fue impedimento para que Sacerdote fuera nombrado purpurado de Lyon en lugar del anterior obispo, Lupo.
Mantener el obispado leonés con vida era estratégicamente importante, por lo que la prédica y el favor del rey Childeberto le permitieron hacer obras importantes, como la reparación de las iglesias de San Pauli y Santa Eulália, la cual se convertiría en un convento consagrado a San Jorge.
Se dice que, mientras acudía a un concilio donde se evaluaría la expulsión del obispo Saffaraco de París, acusado de adulterio continuado, San Sacerdote murió de causas naturales. Tenía 65 años de edad.
¿Qué otros santos católicos se celebran hoy?
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- San Daniel Wyn
- San Elías Espeleota
- San Juan Gabriel Perboyre
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