Desde afuera

Los demócratas, ¿a la izquierda?

El senador independiente Bernie Sanders y la diputada Alexandria Ocasio-Cortez se han convertido de repente en el centro y protagonistas de una gira

Los demócratas, ¿a la izquierda?
José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de México Foto: El Heraldo de México

Desalentados por la derrota de Kamala Harris en las elecciones de noviembre de 2026 y la pérdida de escaños y curules en el Congreso estadunidense, los demócratas parecen hoy receptivos a una rebelión desde la izquierda, que algunos creen sería similar en sus efectos a la revolución que el Tea Party, el Partido del Té, infligió a los republicanos con su activismo y su desplazamiento a la derecha.

El senador independiente Bernie Sanders y la diputada Alexandria Ocasio-Cortez se han convertido de repente en el centro y protagonistas de una gira "contra la oligarquía" que reúne constantemente a miles de demócratas y simpatizantes deseosos de plantar cara a lo que por ahora parece una marea imparable de la derecha.

El hecho de que uno y otro se definen como progresistas y hasta socialistas en un país donde la derecha vuelve, como hizo hace 70 años en la época del macartismo, a usar la palabra socialismo como símil de culpabilidad, permite especular sobre la posición futura de los estadounidenses.

Pero en un país donde la sociedad y el estilo político favorecen la dualidad de acción-reacción, la actual preponderancia de la derecha presagia –o por lo menos es lo que muchos demócratas quieren pensar– un giro igualmente duro hacia el centro o la izquierda.

Por lo pronto, sin embargo, deberán pasar por una temporada incómoda. Por un lado, el líder de la minoría en el senado, Chuck Schumer, está en desacuerdo con su colega en la Cámara baja, Hakeem Jeffries, sobre la estrategia a seguir, como lo que son ahora, un partido de oposición minoritario.

La disposición de los demócratas no mejora en cuanto que sus instituciones legales y de recaudación de fondos están bajo ataque por parte de la administración Trump, porque sus bases están furiosas con su liderazgo en el Congreso y la popularidad de su partido se encuentra en su nivel más bajo en una generación. Además, los progresistas también se enfrentan a la perspectiva de un futuro sin el senador Sanders (independiente de Vermont) como su líder, que a los 83 años de edad ya no está para una campaña presidencial en 2028 y ya puntualizó que no buscaría hacerla.

La aparente heredera del manto es Ocasio-Cortez, de 35 años, una puertorriqueña de Nueva York que, según la publicación política HotLine hoy aparece como la "única líder clara para el puesto".

La situación hace recordar el surgimiento de los Partidos del té, un movimiento de derechas que surgió hacia el año 2005 en rebelión hacia lo que veían como una actitud tibia de los republicanos tradicionales.

La limitada contemporización y la negociación que caracterizaron al Congreso fueron reemplazadas gradualmente por la confrontación y el partidismo a ultranza, a medida que los "teístas" se apoderaron de posiciones entre los republicanos y fueron electos a puestos estatales o legislaturas federales, como los senadores Rand Paul y Marco Rubio, ahora Secretario de Estado.

Fueron, como quiera que sea, antecedente inmediato de la "derecha alternativa" que aliada con Donald Trump ocupa hoy el poder en Estados Unidos.

Falta por ver si la formulación se cumple en el caso de los demócratas, una coalición mucho menos organizada y más diversa que los republicanos.

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS   

COLABORADOR    

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM                                                   

@CARRENOJOSE

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