Mientras Xóchitl Gálvez y su equipo están más preocupados en armar una campaña de desprestigio internacional a través de medios de comunicación internacionales y digitales, la doctora Claudia Sheinbaum se concentró con su equipo de trabajo en la preparación meticulosa de lo que será su Proyecto de Nación.
Este proceso implica la cuidadosa elaboración de políticas, programas y estrategias que definirán su visión para el país y que serán la guía de su campaña presidencial. Una vez más se contrastan las diferencias entre ambas. Gálvez se enfoca en las tácticas de desprestigio, mientras que la doctora Sheinbaum demuestra un compromiso claro con la construcción de un proyecto sólido y sustantivo para el país.
Morena inició el proceso de elaboración del Proyecto de Nación a través del Consejo Nacional, designando a los responsables de su desarrollo. Posteriormente se nombró al doctor Juan Ramón de la Fuente, como coordinador del equipo para apoyar con el plan de gobierno, para ello, se desarrollaron mesas temáticas denominadas “Diálogos para la trasformación”.
Estos diálogos tenían como objetivo entablar conversaciones con todos los sectores interesados en aportar, sugerir o plantear ideas para avanzar y consolidar la transformación del país, y contaron con la participación de personas expertas en diversos temas relevantes para el desarrollo del país.
El Proyecto de Nación se ha construido de manera colaborativa, no solo a través de la designación de un equipo encargado, sino también mediante la recopilación de aportes y percepciones de diversos estados del país durante las giras de Claudia Sheinbaum y de sus encuentros con la ciudadanía. Y aunque el Zócalo será testigo de la presentación del Proyecto, ya tenemos algún adelanto de lo que vendrá.
Con anterioridad la doctora había presentado 17 puntos a los que denominó sueños, y de manera más reciente, en el marco de su registro como candidata, presentó 15 principios generales.
Lo primero que se destaca del conjunto de estos puntos es la continuidad. No sólo la continuidad de las políticas de gobierno, como la austeridad republicana, la disciplina fiscal y el manejo eficiente de los recursos nacionales, sino que va más allá, haciendo suyos los proyectos del presidente López Obrador, como el proyecto de los trenes de pasajeros, que tendrá seis nuevas rutas. Los trenes sin duda serán una opción más económica para viajar distancias largas y podrían aliviar los nudos de comunicación entre estados.
La educación ocupará un lugar privilegiado y se sumará al fortalecimiento del sistema público de salud y al acceso a viviendas dignas para todos los mexicanos. En su propuesta, Sheinbaum ha delineado la justicia para los Pueblos Indígenas, reconociendo y respetando sus derechos.
Un eje central será la igualdad sustantiva para las mujeres y el derecho a una vida libre de violencias. Lo anunciado hasta el momento por la doctora incluye una visión integral para México, y aborda temas fundamentales como la división de poderes, el respeto a los derechos humanos y la igualdad de género. Además, con un fuerte compromiso con la justicia social, el desarrollo económico, la protección del medio ambiente y la seguridad ciudadana.
Hay un gran entusiasmo por la próxima presentación oficial del proyecto, que será en el Zócalo de la Ciudad de México, el próximo viernes primero de marzo a las 16:00 horas. Se espera un lleno total ya que marcará el inicio de la campaña presidencial. Ojalá que todos los que estén interesados puedan asistir y ser testigos de este evento significativo para el futuro del país.
POR ARTURO ÁVILA ANAYA
ANALISTA POLÍTICO, EXPERTO EN SEGURIDAD NACIONAL HARVARD
@ARTUROAVILA_MX
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