La Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo (UNCTAD) organizó la semana pasada en Ginebra, en el marco de la iniciativa "e Trade for All", un importante evento sobre comercio electrónico, con el fin de movilizar el apoyo mundial a una economía digital más inclusiva y sostenible.
Bajo el lema Modelar el futuro de la economía digital, la eWeek de la UNCTAD conectó presencialmente y en línea a más de tres mil personas de 130 países, incluyendo personalidades y expertos de gobiernos, empresas, organizaciones internacionales, bancos de desarrollo, universidades y la sociedad civil. Fueron más de 150 sesiones centradas en abordar cuestiones urgentes relacionadas con la digitalización.
En las sesiones de la eWeek se puso de manifiesto que el comercio electrónico es un gran motor de crecimiento económico, inclusivo y creación de empleo. Así, la economía digital impulsada por los datos ofrece grandes oportunidades para reducir las barreras comerciales e incentivar el desarrollo financiero. No obstante, también se evidenció que las brechas digitales y de datos se están incrementando y podrían agravar las desigualdades entre los países y al interior de las sociedades nacionales.
Según datos de la UNCTAD, la geografía de la economía digital está altamente concentrada en Estados Unidos y China con 90% del valor de capitalización de mercado de las 70 plataformas digitales más grandes del mundo.
La velocidad con que avanzan las tecnologías sobrepasa la capacidad que tienen los países –especialmente en lo que ahora se denomina el Sur Global – para adaptarse a la transformación digital y sus consiguientes cambios sociales y económicos.
Como lo hemos comentado antes, los flujos masivos de datos de la economía digital exigen respuestas de gobernanza mundial a la concentración del mercado y la distribución desigual de sus beneficios. En este contexto, y como lo ha señalado el secretario General de la ONU, António Guterres, "la inclusión es esencial para construir una economía digital que ofrezca resultados para todos".
Por otro lado, y con la atención mundial puesta en la COP28, la eWeek 2023 destacó el potencial de la digitalización para combatir el cambio climático y también sus costos ambientales.
Las tecnologías basadas en datos como el Internet de las cosas (IOT), la robótica y la Inteligencia Artificial (IA) pueden mejorar el seguimiento del cambio climático, optimizar el uso de la energía y los procesos de producción, y promover la adopción de tecnologías bajas en emisiones. Sin embargo, la transformación digital también ha dejado su huella en el planeta a través del agotamiento de algunas materias primas, el uso de energía y agua, la contaminación y los desechos.
En suma, la eWeek ha generado muchas ideas y propuestas que podrían contribuir a la construcción del Pacto Digital Mundial encaminado a lograr un porvenir libre y seguro para todos, cuestión que forma parte de la agenda de la Cumbre del Futuro convocada por la ONU para el próximo año.
POR CARLOS DE ICAZA
EMBAJADOR EMÉRITO DE MÉXICO Y EX SUBSECRETARIO DE RELACIONES EXTERIORES
EEZ