COLUMNA INVITADA

Sequía, emergencia nacional

En estados como Nuevo León, la población ya enfrenta una situación de crisis, reconocida a partir de enero del presente año, pero que continúa escalando

OPINIÓN

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Jorge Romero Herrera / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El agua es un bien esencial, de primera necesidad y un derecho humano. En México desde hace 11 años enfrentamos condiciones de sequía excepcionales, que hoy afectan a por lo menos 23 entidades federativas del norte y centro del país, con situaciones que van desde sequía severa a extrema, afectando a más de 1,500 municipios, diversos sectores productivos y miles de familias, de acuerdo con el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Lamentablemente, como en muchos otros temas de vital interés, nuestro gobierno no cuenta con una estrategia de mitigación de sus efectos, ni una política de Estado para una mejor gestión de la demanda de agua, que optimice su uso y priorice el ahorro hídrico. Por el contrario, desde los más altos niveles de la administración pública federal, se aborda el problema con frivolidad, ligereza y desenfado ante esta emergencia.

En estados como Nuevo León, la población ya enfrenta una situación de crisis, reconocida a partir de enero del presente año, pero que continúa escalando. Ello ha llevado al gobierno estatal a instrumentar medidas de emergencia que van, desde cortes al suministro por más de 24 horas, hasta solicitar paralizar la industria refresquera y cervecera, principalmente, para destinar el agua que reciben al uso doméstico.

De acuerdo con el reporte del Monitor de Sequía del 15 de junio pasado de Conagua, este no es el único de los estados que pasa por una crisis hídrica. Estados como Durango, Coahuila y San Luis Potosí, presentan de igual forma una problemática de sequía moderada, en tanto Baja California Sur, el sur de Sonora y norte de Chihuahua, han presentado un incremento del problema hasta llegar a sequía extrema.

De acuerdo con el último reporte del 18 de julio de 2022, el 62 por ciento del territorio nacional presenta sequía moderada a excepcional, es decir, 764 municipios con al menos una categoría de sequía y 782 municipios anormalmente secos.

La mayoría de los expertos en la materia coinciden en que la ausencia de inversión en infraestructura y de previsión respecto de políticas para atender la emergencia, han contribuido a que muchos de estos estados y la CDMX se encuentren secos y con problemas de agua.

El ex titular de la CONAGUA, José Luis Luege, señaló que en 2012 este organismo contaba con 62 mil 15 millones de pesos, un presupuesto que se redujo en los años siguientes hasta acabar con 33 mil 916 millones en 2022; lo que ha impactado en toda su infraestructura. La inversión planeada de 70 mil millones de pesos que se planteó en la Agenda 2030 se vino abajo con este gobierno.

El pasado 12 de julio de 2022, después de varios meses de requerirse, se publicó en el Diario Oficial el acuerdo de carácter general de inicio de emergencia por ocurrencia de sequía severa, extrema o excepcional en cuencas para el año 2022. Esto debió obligar al gobierno federal a considerarlo como un desastre natural, sin embargo, nuevamente fue desestimado.

Desde la Cámara de diputados, en la bancada de Acción Nacional hemos propuesto diversos puntos de acuerdo e iniciativas que garanticen el uso correcto del vital líquido y que, de alguna manera, se mitigue la afectación que está ocasionando en las regiones donde se vive ya una problemática de sequía. Entre las propuestas destacan:

Establecer que los edificios públicos de gobierno cuenten con infraestructura para captar, almacenar, bombear y dar tratamiento al agua de lluvia para su aprovechamiento y reutilización.

Implementar en los programas de estudio a nivel nacional los conceptos de cultura del agua, su conservación, cuidado, rehuso y el uso racional de los recursos naturales. Así como su difusión en los medios de comunicación.

También, el saneamiento de los cuerpos de agua a través del control de la proliferación del lirio acuático ya que los afectan gravemente.

No debemos dejar que este problema siga escalando y afectando cada vez a un mayor número de habitantes y Estados.  Por eso, invitamos a las autoridades federales a redoblar los esfuerzos e implementar una política de estado en materia hídrica efectiva.

POR JORGE ROMERO HERRERA
COORDINADOR DEL PAN EN LA CÁMARA DE DIPUTADOS
@JORGEROHE

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