TRES EN RAYA

Transparencia color chapopote

Carlos Romero Deschamps ya no es el líder sindical de Pemex. Al menos eso es lo que la Secretaría del Trabajo considera

OPINIÓN

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Verónica Malo Guzmán / Tres en Raya / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Carlos Romero Deschamps ya no es el líder sindical de Pemex. Al menos eso es lo que la Secretaría del Trabajo considera; esto es, que ese sindicato no cuenta al momento con un secretario general. En teoría será hasta este 31 de enero cuando, por votación ¿libre y secreta? se elija al nuevo dirigente de tan poderosa organización gremial. 

En el interim no faltó el vivillo (entiéndase Jorge Hernández Lira) que soltó, apenas el año pasado, que él había sido elegido para esa distinción en octubre del 2012. Total, sugiere que estuvo dormido casi 10 años con su nombramiento bajo el brazo y nosotros ni en cuenta…

López Obrador ofreció que a partir de este lunes próximo la mañanera sirva de pasarela a los 22 suspirantes al cargo de secretario general del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (un horror). En todo caso, habría que especificar cuál porque, verán ustedes, hay otro sindicato en Pemex pero a ese ni quien lo pele.

Entre Pemex y subsidiarias, el STPRM conglomera a más de 103 mil empleados. Será interesante saber si ahora —bueno, dentro de unos años que concluya su actual contrato— todos los empleados de la recién adquirida Deer Park también se sumarán a tan poderoso ente sindical. Por ahora, durante los dos primeros años, Pemex NO podrá despedir a ningún trabajador de esa refinería.
Aunque algunos aspiran a que las elecciones para dirigente del STPRM sean libres y sin chanchullos, muchos señalan lo poco probable de lo mismo.

Y es que a pesar de que se hará con todo lo avanzado de la electrónica, el sistema de registro de votos y de conteo comicial estará en manos de la gente que trabajó para Carlos Romero Deschamps. Luis Ricardo Aldana Prieto, actual tesorero del sindicato, quien ha sido senador y diputado del PRI y vinculado con Romero Deschamps, va hoy en caballo de Hacienda (¿o es más adecuado decir que va en ganso cansado?) para convertirse en el nuevo secretario general. En pocas palabras, que todo cambie para que todo siga igual.

El proceso inició el año pasado y de forma bastante desaseada. De entrada no se permitió la inscripción de aspirantes a otros puestos clave de la organización; estos continúan en el poder del equipo que dejó Romero Deschamps.

Con dichos antecedentes se puede augurar que las elecciones no serán transparentes. Ello a pesar de que el inquilino de Palacio diga que ahora se le debe tener “ …confianza a la gente porque en la antidemocracia que imperó mucho tiempo el pueblo no contaba, era susceptible de manipulación o lo podían engañar fácilmente, cuando se amarraban los perritos con longaniza, ya no, ya no es así”.

Me temo que sigue siendo exactamente así. Eso además de que increíblemente nadie protestó a los dichos del presidente. Aviso también de que López Obrador minará la figura que gane, sea cual sea esta. Así debe entenderse lo por él dicho con respecto al proceso de elección: “la libertad, no se olvide, no se implora, se conquista; no hay que dejarse intimidar por nadie y quienes no ganen, deben seguir en la lucha si sus peticiones son justas”.

En otras palabras, mismo antes de las elecciones, ya anuncia las impugnaciones y la libertad de golpeteo. Las canonjías otorgadas a los sindicalizados del STPRM son el sueño de cualquier trabajador, petrolero o no. Desafortunadamente, en este caso las pagamos todos los ciudadanos, máxime con las ingentes pérdidas que enfrenta Pemex.

Ojalá (esperanzas escondidas en lo más profundo de los pozos petroleros) el próximo líder petrolero tenga como visión defender los derechos de los trabajadores, y no abocarse a enriquecerse de manera tal que hasta sus mascotas puedan viajar en avión particular como los bulldogs de Romero Deschamps.

Pero mientras el proceso electoral sindical siga por los caminos que hoy conocemos, con una transparencia color chapopote, lo que se espera de este no pinta para nada bueno.

POR VERÓNICA MALO
VERONICAMALOGUZMAN@GMAIL.COM
@MALOGUZMANVERO

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