1. La intervención de la embajada de Estados Unidos en asuntos internos de nuestro país, y de la CIA en particular, no es un asunto nuevo.
2. Para muestra dos brutales botones: fue en la embajada de Estados Unidos en México, donde se fraguó el golpe de estado que derrocó al gobierno del presidente Madero y terminó con su vida, junto con la del vicepresidente José María Pino Suárez.
3. El segundo botón no es menos terrible: se sabe a estas alturas de la historia, que Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría Álvarez, ambos expresidentes de la República, fueron agentes de la CIA. El primero, identificado como el número uno y el segundo, como el número dos.
4. Es harto conocido, que desde la embajada de Estados Unidos en los diversos países que tienen gobiernos surgidos del pueblo y a éste responden, se complota para lograr deponer a esos gobiernos democrática y legítimamente constituidos.
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5. En América latina es larga la lista de agravios: Salvador Allende en Chile; Isabel Perón en Argentina; y para no hacer una lista interminable, muy recientemente, Evo Morales en Bolivia; Zelaya en Honduras; Dilma Rousseff en Brasil y Lugo en Paraguay.
6. Pero no por sabido, deja de ser grave e indignante la intervención de la embajada de Estados Unidos financiando a Claudio X González, que el compañero presidente López Obrador denunció, apoyándose en la investigación realizada por la revista “Contralínea”.
7. Claudio X González es uno de los principales opositores a nuestro gobierno. Interpuso más de un centenar de amparos contra la construcción del aeropuerto Felipe Ángeles y ha sido figura destacada en la tarea golpista en contra de nuestro gobierno.
8. Este obscuro personaje ha ido más lejos y ha logrado lo que parecía imposible: que frente a la desesperación de la derecha el PRI y el PAN se aliaran electoralmente. De la servil participación del PRD en esa alianza, ni siquiera vale la pena hablar.
9. Así las cosas, la embajada de Estados Unidos no sólo ha financiado a Claudio X González, sino muy probablemente también ha financiado al PRI y al PAN.
10. Ese solo hecho sería motivo suficiente para retirar el registro a ambos partidos. Pero no veo al INE preocupado en investigar semejante ilegalidad y acto de franca traición a la patria.
11. Por ello, tendrá que ser el pueblo quien les retire el registro a esas lacras electorales, no otorgándoles ni un solo voto en las urnas. De nada servirá que el INE quiera favorecerlos si el electorado los desprecia negándoles su apoyo en las urnas el próximo 6 de junio. Merecen dicho desprecio y merecen así mismo la desaparición política.
Ni un voto al PRIANRD.
POR GERARDO FERNÁNDEZ NOROÑA
FEDERAL DEL PT
@FERNANDEZNORONA
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