Esta semana, en Palacio Nacional, el Presidente Andrés Manuel López Obrador presentó, en compañía de representantes del sector privado, un plan con proyectos de infraestructura. En su mensaje el Primer Mandatario fue muy claro: “Es muy importante que sepamos que no podríamos solos, no podría solo el sector público reactivar la economía como se necesita”.
Celebro que el gobierno haga un reconocimiento de la crucial participación de la iniciativa privada para la recuperación económica de nuestro país, aunque lamento la ausencia de proyectos en materia de energías renovables y conectividad.
Esta preocupación la externé al Secretario de Hacienda, durante su comparecencia en el Senado de la República.
Y es que el proyecto del gobierno es rescatar a la Comisión Federal de Electricidad; quieren que sus números sean negros en lugar de rojos.
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Sin duda para alcanzar ese objetivo es necesario dejar de comprar energía cara y atraer inversión para generar empleos.
Desafortunadamente, el actual Gobierno no invierte en nueva generación eléctrica, en nuevas líneas de transmisión, en tecnologías de generación distribuida, ni deja que el sector privado invierta.
Para reactivar la economía hay que rehacer el sistema eléctrico nacional, a fin de que sea limpio, eficiente y generador de empleos. Se estima que para llegar al 35% de energías renovables en 2024, a lo que se comprometió México en el marco de los Acuerdos de París, se requiere una inversión de 57 mil millones de dólares, dinero que el Gobierno no tiene.
El futuro de la energía es la eléctrica. Y el futuro de la energía eléctrica es la renovable.
En los últimos dos años, CFE ha acumulado pérdidas por más de 156 mil millones de pesos y, tan solo en el primer semestre del año, ya se contabilizan pérdidas por 42 mil millones de pesos, es decir casi un tercio de las pérdidas acumuladas de 2018 y 2019.
En materia de generación de energía eléctrica, sabemos que a la CFE le cuesta 40% más que a los productores privados a través de Legislación Legada y más de 200% que los costos de generación de los proyectos de energía renovable que ganaron en las subastas de largo plazo.
Si promediamos todos los costos de generación de energía por parte de la CFE y los comparamos con el promedio de los productores independientes, ante una demanda anual de 318 mil Gigawatts/hora en el país, si cumpliéramos con los Acuerdos de Paris, podríamos fácilmente generarle a la CFE ahorros por unos 80 mil millones de pesos, ya que actualmente CFE compra solo el 8% de su energía de fuentes renovables.
Sin duda, estos ahorros podrían mejorar las finanzas del país. Usarse para entregar el apoyo del Ingreso Básico Universal o en mantener los fideicomisos que se pretenden desaparecer.
Es necesario que las Secretarías de Hacienda y Energía, junto con el Senado de la República puedan crear un grupo de trabajo para que CFE deje de perder dinero, para apostarle a las energías renovables y para que la energía sea más barata para los mexicanos.
Por XÓCHITL GÁLVEZ
SENADORA DEL PAN
@XOCHITLGALVEZ