Mariana Sánchez Dávalos, una joven estudiante de medicina se convirtió en el más reciente rostro de violencia contra la mujer en México, al ser estrangulada hasta su muerte la semana pasada en Ocasingo, Chiapas.
Mientras la Fiscalía General del Estado abrió una carpeta de investigación por el delito de homicidio, conforme a protocolo de feminicidio, la comunidad médica internacional y diversos sectores de la sociedad mexicana, han exhortando a las autoridades a esclarecer el probable asesinato de Sánchez Dávalos, quien unas semanas antes denunció una agresión sexual en su contra, sin que recibiera ayuda.
Este día, el Pleno del Senado de la República guardó un minuto de silencio y pidió investigar la muerte de Mariana Sánchez Dávalos de 24 años de edad.
“Desde el @senadomexicano hacemos un llamado a las autoridades correspondientes para investigar y sancionar a los responsables del asesinato de la médica Mariana Sánchez Dávalos”, tuiteó esta tarde Eduardo Ramírez, senador por Chiapas y presidente del Senado de la República.
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Por la mañana compañeros estudiantes de medicina organizaron una protesta frente a la universidad exigiendo respuestas sobre por qué a la médica de 24 años se le negó su súplica de cambiar de ubicación y una investigación sobre la policía ignorando su informe sobre la agresión sexual.
El Comité de Estudiantes de Medicina del Estado de Chiapas urgiendo al director de la Facultad de Medicina Humana, Dr. Manuel Velasco Suárez, que explique su falta de atención, “ya que no es la primera vez que situaciones como esta ocurren durante el proceso de internado o servicio social”.
Mediante un comunicado, la Secretaría de Salud federal manifestó su indignación y reiteró su postura de cero tolerancia hacia las conductas y manifestaciones de violencia de género y contra las mujeres.
Mariana Sánchez Dávalos, de 24 años, era una estudiante de medicina que se encontraba haciendo su servicio social en una clínica en el municipio de Ocosingo. Fue encontrada muerta el 28 de enero.