La tarde de este miércoles decenas de habitantes de la comunidad de Sola de Vega, ubicada en la Sierra Sur de Oaxaca se congregaron en uno de los accesos de la comunidad y realizaron un bloqueo, amenazaron a su presidente municipal, Esaú Calvo Núñez, con lincharlo, lo acusan de corrupción luego que se diera a conocer que había adquirido un rancho.
Además, los habitantes de la comunidad lo relacionan con la delincuencia organizada; las imágenes del alcalde siendo amenazado con lincharlo fuerorncompartidas en las redes sociales, en donde se ve cómo colocan una soga al cuello de Esaú Calvo Núñez. Los videos se volvieron virales y se observa a las personas enfurecidas reclamándole que no ha realizado obras en la población.
En las grabaciones, que fueron compartidas en las redes, se observa al presidente municipal entre lágrimas implorar por su vida, mientras los pobladores le insistían que "El gobierno no te puso, te puso el pueblo". También se escucha a los manifestantes decirle en los videos: ”Si el pueblo quiere que te saquen, vámonos”.
Le perdonan la vida
Tras varias horas de reclamos y manifestaciones, los pobladores accedieron a quitarle la soga a Esaú Calvo Núñez y decidieron no lincharlo, pero, de acuerdo con información de medios locales, el alcalde fue recluido en un anexo contiguo al ayuntamiento de Sola de Vega, al a espera que renuncie y su administración sea auditada.
Te podría interesar
El representante del Comité Ciudadano de Sola de Vega, Martín Mijangos, denunció que Clavo Núñez ha usado el presupuesto público para adquirir un rancho, caballos pura sangre y automóviles de lujo. Además de solo beneficiar a unas cuantas personas, entre ellos a integrantes del crimen organizado, quienes trabajan algunos terrenos de la población.
Durante una entrevista radiofónica con el periodista oaxaqueño Humberto Cruz, el presidente municipal señaló que sñi creyó que sería linchado: “Yo sí pensé, hasta aquí se acabó el corrido, pero afortunadamente hubo un amigo que intervino a favor mío”, declaró.
Esaú Calvo Núñez aseguró que cuando se vio rodeado de al menos 50 enfurecidos ciudadanos, uno con una soga y otro con un machete, imaginó que lo matarían ahí mismo. Tras lo ocurrido, los habitantes de Sola de Vega cerraron los accesos a la población y colocaron barricadas para limitar el tránsito. La carretera es una conexión entre la capital del estado y Puerto Escondido.